DIOS es para siempreMuestra

La salud es pasajera, pero DIOS es para siempre

A menos que mi médico me esté mintiendo, mi cuerpo no está mejorando. Mi estatura de 6'3” se ha reducido a 6'2” (en un buen día), una mala señal para mi encorvada columna vertebral. Los chistes acerca de lo mal que como y mi bajo nivel de colesterol dejaron de ser tan divertidos ahora que el colesterol ha subido. Y aquí una sorpresa: esta semana me lastimé un músculo de la espalda. . . ¡jugando tenis de mesa!

¿Le ha pasado algo así? ¿Es usted prueba viviente de la creencia de Pablo de que nuestros cuerpos están en «esclavitud de corrupción» (Romanos 8:21)? ¿Sus articulaciones tienen más dificultad para moverse por la mañana? ¿Ha renunciado su mente a la capacidad de memorizar nombres, caras y pasajes de la Biblia? ¿Necesita «lentes» que aclaren estas palabras o aparatos auditivos para captar el mensaje del pastor? La edad, de muchas maneras, es nuestra enemiga.

En contraste, por eso adoro a DIOS. El DIOS eterno que mostró su poder en el mar Rojo y tuvo el poder de resucitar a su hijo de la tumba continúa teniendo la fuerza suficiente para luchar contra todos sus enemigos espirituales. No hay ningún desafío al que usted se enfrente, ninguna tentación que esté negando, ni ningún demonio al que esté resistiendo, que él no pueda vencer con la fuerza de su poder.

Pablo nos exhorta: «manténganse firmes en el Señor y en el poder de su fuerza» (Efesios 6:10). Así que no se preocupe si la edad le está pasando factura. Su fuerza nunca se desvanecerá si su fuerza es el DIOS eterno.