[Serie Conoce a Jesús] No Te Olvides De JesucristoMuestra

Es muy fácil olvidar a una persona que conoces poco. Por ello es necesario que nuestro conocimiento de Jesucristo este vinculado con la revelación que se desprende del estudio de su Palabra y la relación que desarrollamos con él a través de nuestra vida de oración y fe. Sin dudas, sin relación no hay revelación (y viceversa).

También, al hablar de conocimiento, debemos evitar pensar que este consiste simplemente en aprender datos biográficos o recolectar información sobre Jesús. Al contrario, la invitación de la Biblia es la de relacionarnos con ella buscando comprenderla, lo que va mucho más allá de tan sola leerla. La comprensión tiene como particularidad el énfasis en la reflexión y la práctica de lo que se ha aprendido (lo que se ha tomado e incorporado) y produce un mayor nivel de devoción y transformación personal.

Pablo llegó a decir que los ministerios de la iglesia existen con el fin de perfeccionar y edificar a los creyentes y a la iglesia, siendo su propósito trascendental la unidad de la fe y el conocimiento del Hijo de Dios (Ef. 4:11-13). Si el conocimiento de Jesucristo es parte de la misión de la iglesia, entonces, el mismo es importante. En realidad, solo el conocimiento bíblico, experimental y personal de Jesús ayudará al creyente a comprender su fe.

Además, el escritor a los Hebreos presenta al conocimiento de Jesucristo como la enseñanza elemental sobre la cual descansan el resto de las doctrinas cristianas (Heb. 6:1-2). Las personas a las cuales el autor de Hebreos dirigía esta carta se habían hecho “lentos para entender” o “tardos para oír” (Heb. 5:11-12), lo que hablaba de su torpeza espiritual a la hora de comprender la fe que se les había transmitido. De esto mismo debemos guardarnos y recibir la exhortación de volver a la enseñanza elemental acerca de Jesús.

Para Reflexionar:

¿De qué manera se relaciona el conocimiento de Jesucristo con el resto de las enseñanzas de la fe?

Oración:

Señor Jesús, te doy gracias por la oportunidad de conocerte a través de tu Palabra y al verte obrar en mi vida día a día. Amén.