OCASIÓN

Ayer vimos la importancia de vivir expectantes en fe de que estamos en el tiempo que Dios quiere y que la oportunidad se está acercando. Hoy hacemos foco en la ocasión.

Mientras el tiempo de manera horizontal va transcurriendo, llegará a esa línea el cruce vertical de la otra, la de la ocasión. Es decir que cuando el tiempo y la ocasión se cruzan, es cuando estamos frente a la oportunidad.

Así como el tiempo apela a mi expectativa de fe, la ocasión apela a mi valentía. La ocasión son los hechos que pasan en la vida y nos abre la puerta a la oportunidad.

Te cuento esta historia para mayor comprensión. Una mujer vendía su casa por un peso y se entera de esto un mendigo que vio ese anuncio en un periódico. Fue al lugar, se encontró con la mujer y le dijo: ¿usted vende esta casa de dos pisos, con pileta y parque tan solo por un peso? ¿Cuál es trampa? ¿Cuántos ya vinieron y se dieron cuenta del engaño? Ella le respondió que hasta ese día nadie acudió al lugar y que no hay engaño alguno, la casa se vende por un peso. Este sorprendido, encuentra un peso en su bolsillo, seguramente de alguien que le dio una ayuda a su tiempo. Aun con dudas insiste ¿y porque por un peso entonces? Es que mi esposo falleció y dejó una carta en la que me pide que venda esta propiedad y el dinero recaudado se lo entregue a quien fue su amante.

Tranquilo, esto no es más que ilustrativo, pero así son las ocasiones que abren la puerta cuando llegan en el tiempo de tu vida. Mientras esperas en fe, estate atento a las ocasiones que pasan en la vida.

Oración: Padre, hoy es un nuevo día de esperanza en mi corazón, por lo que te ruego que me llenes de tu Espíritu para recibir la valentía frente a las ocasiones que ocurren delante mí y aprovechar las puertas que se abren a la oportunidad. En el Nombre de Jesús, amén.