7 Señales De Caminar en El Espíritu SantoMuestra

Cuando el Espíritu Santo descendió sobre Saúl, fue a la guerra junto a Samuel. El rey se asoció con el profeta. Tenían una gran relación mientras Saúl caminaba en el Espíritu Santo. Cuando Saúl comenzó a desobedecer al Señor, Samuel se desanimó mucho y creó fricciones en su relación. Saúl comenzó a tener problemas de autoridad.

No podemos caminar en unción y oponernos a la autoridad al mismo tiempo. Compare a David con Saúl. David, que estaba lleno del Espíritu Santo, se sometió a su padre, quien lo envió a entregar comida a sus hermanos en el campo de batalla. David no fue a pelear contra Goliat; fue a hacer un mandado para su papá. Al llegar, escuchó al gigante burlándose del nombre todopoderoso de Dios y, en consecuencia, le pidió permiso a Saúl para luchar contra el gigante. David honró a una autoridad defectuosa como la de Saúl lo suficiente como para pedirle permiso. Aunque David se hizo famoso en Israel y tuvo la oportunidad de hacerle a su enemigo lo que quisiera, nunca levantó la mano para matar a Saúl, que había sido ungido por el profeta Samuel. David también fue ungido y tenía un llamado que cumplir, pero Saúl hizo de su vida un verdadero infierno. Una vez David, silenciosamente bajo el amparo de la noche, cortó una parte del manto de Saúl para dejar claro que no tenía la intención de lastimarlo. Pero incluso ese acto de cortar un pequeño trozo del manto de Saúl trajo convicción en el tierno corazón de David. David honró la autoridad incluso cuando la autoridad no lo honró a él. Esa es una marca de una vida llena del Espíritu Santo. Saúl tuvo problemas con la autoridad después de que ya no caminaba en el Espíritu Santo.

Debemos unirnos a la autoridades en lugar de luchar contra ellos. Honrar a las autoridades revela que honramos al Espíritu Santo. Recuerde, no podemos caminar en autoridad si nos rebelamos contra la autoridad.

Oremos juntos.

Espíritu Santo, reemplaza la oscuridad dentro de mí con Tu suave luz.