La Ciencia De DiosMuestra

La Creación 

Algo cambio en mí desde aquel momento en que experimente el milagro, una especie de convicción había nacido dentro de mi capaz de refutar hasta la mas cruda y bien fundada lógica. Aquella voz interna que me decía “no puedes creerlo, no tienes forma de demostrarlo” se veía apocada por la implacable voz que me decía “lo viste con tus propios ojos, es tan real como tu existencia”. 

Con ese fuego comenzando arder dentro de mi y la insaciable sed de respuestas y conocimiento, leí el siguiente versículo “Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo…” (Genesis 1:2). Al instante encontré en mi mente un paralelismo que me dejo estupefacto y quería contarle a todo el mundo lo que ante mis ojos y al menos para mí había sido una revelación de nuevo conocimiento.

Desde pequeño me vi atraído por la ciencia; los misterios de la naturaleza y el espacio, llamaban la atención en cada cosa que hacia, por lo tanto leía y aprendía mas y mas al respecto. Uno de los enigmas mas grandes del ser humano, creo que sin dudas es la creación, como es que todo comenzó. Hasta ese momento lo único que conocía, era que científicamente la creación comenzó y se suscito gracias al Big Bang, es decir una explosión de magnitud sideral que marco el inicio y creación de la materia, el espacio y el tiempo. Provocando un caos y una expansión de proporciones monumentales que crearon lo que existe en el universo. Intento imaginar el desorden después de semejante explosión. 

Cuando el segundo versículo de la Biblia me enseño que en el principio había tal desorden, se me hizo luz que lo que decía la Biblia era totalmente cierto y que junto con la ciencia estaban diciendo exactamente lo mismo, solo que desde un punto de vista distinto y con mayores detalles por parte de esta ultima. Extasiado por tal descubrimiento, la fe en mi corazón comenzó a crecer a pasos agigantados.

Cuando comencé a rodearme con otras personas de fe, me di cuenta de otra cosa, la mayoría de ellos tenia un argumento fuerte en contra de la ciencia y hasta le tenían cierto grado de temor. Lo cierto es que a partir de mi encuentro con la fe, cada vez que se descubre algo nuevo o leo un nuevo articulo sobre ciencia, mas se acrecienta mi fe, porque lo que en realidad hace la ciencia no es negar la existencia de un ser supremo, sino reafirmar la magnitud, inteligencia y poder de un Dios creativo con recursos ilimitados. 

Cuando escucho a astrónomos decir que cada parte de la creación, a pesar de haber nacido en un desorden, esta perfectamente alineada en su lugar como si alguien lo hubiese puesto allí, o cuando seguimos descubriendo sobre el complejo funcionamiento del cerebro humano y su ilimitada capacidad, solo puedo sentirme feliz de creer en ese Dios que lo creo todo de una manera creativamente inigualable y que como una creación nacida en el caos, me da la tranquilidad de que todo esta bajo control. Si descubrimos más y más del funcionamiento de las cosas, descubrimos mas y mas de la naturaleza de su creador. Descubrimos más y mas de la ciencia de Dios!