Vida EternaMuestra

Nuestros cuerpos serán renovados también.

El día de ayer, vimos que la muerte física no detiene la vida eterna. Sin embargo, ¡esto no significa que nuestros cuerpos no son importantes o que no tienen nada que ver con el futuro de Dios! Cuando Jesús vuelva a juzgar a la humanidad y cree una nueva tierra, nuestros cuerpos ascenderán también. Serán transformados a la gloriosa semejanza del cuerpo de Cristo luego de su resurrección. Nuestros cuerpos serán inmortales y no perecerán. El apóstol Pablo compara esto con la siembra de una semilla: nuestros cuerpos mortales son enterrados en debilidad y deshonor - como podemos todos testificar al haber ido a un funeral. No hay nada glorioso en la muerte y un cuerpo decaído. ¡Pero éste no es el final! Nuestros cuerpos serán levantados y reunidos con nuestros espíritus para vivir por siempre en la nueva tierra de Dios. La "vida eterna" no es algo meramente espiritual. Es cierto que nuestros espíritus estarán en el cielo hasta el fin de la era actual, pero eso es sólamente una parada, por decirlo de alguna manera. Nosotros no estaremos en la vida eterna con Dios solamente en espíritu, sino también como personas con un cuerpo renovado y un espíritu purificado. Dios valora tanto nuestro cuerpo que en vez de destruirlo, lo renueva.

¿Lo valoras tú también de esa manera?