BendecirEjemplo

Hay miles de cosas que el ser humano busca para encontrar la felicidad; cursos motivacionales, comprar cosas innecesarias, deleitarse con bienes materiales, sexo, vicios etc. Y el resultado siempre es el mismo, no lleva a la felicidad. Conocemos perfectamente que todo ser humano tiene un "hueco" que sólo puede llenar Jesús, y con la llenura de ese "hueco" comenzamos a experimentar las verdaderas bendiciones y la felicidad comienza a inundarnos. Desprendemos de nuestros anhelos todo lo que sea diferente al reino de Dios, y eso trae consigo un crecimiento espiritual lleno de contentamiento y nos convencemos que teniendo a Jesucristo, estamos completos en todo.

El Proverbio 15:23 nos enseña la clave de la felicidad: ¡BENDECIR!

Cada vez que hablamos cosas buenas, nos llenamos de bendición, de esperanza y de fe. Nuestro espíritu recibe un "código", (por decirlo de algún modo), que trae consigo felicidad a nuestra alma. ¡Que bendición que con algo tan simple podamos encontrar la felicidad! A fin de cuentas, hablar es algo que hacemos en todo momento. En promedio hablamos al día entre 15 y 27 mil palabras, evidentemente todas las áreas de nuestra vida requieren de comunicación verbal, pero es más evidente aún, que en todas esas áreas, cada palabra debe ser de bendición y jamás de destrucción. ¿Cuántas palabras nos traerán felicidad en este día? ¡Recuerda! El poder de la vida y de la muerte está en nuestra lengua.