Menos / Miedo | Es Hora De Desesperarse Por DiosMuestra

Jesús, al cruzar al otro lado del mar, fue recibido por una gran multitud y por un hombre llamado Jairo , que era un líder en la sinagoga. Jairo, ante la inminente muerte de su hija, se arrodilló y clamó a Jesús, pidiéndole ayuda. Jesús se conmueve y una multitud cada vez más numerosa le sigue hacia la casa de Jairo. En este momento se percibe un gran impulso y desesperación. Mientras se dirige a responder a la necesidad de Jairo, se le acerca a Jesús en silencio otra mujer desesperada por una intervención y una curación. La condición de esta mujer había empeorado y, aunque había sido tratada por muchos, nunca experimentó alivio. En un momento de desesperación, extendió la mano y tocó el borde del manto de Jesús e inmediatamente su hemorragia cesó y sintió en su cuerpo que estaba curada. Se esforzó más allá de las limitaciones que la sociedad le había impuesto y su fe audaz detuvo a Jesús. Toda la atención de la multitud se dirigió a esta mujer, que habría temido la respuesta del Maestro y la humillación de la multitud, pero Jesús declaró que por su fe había sido curada, sanada y en paz.  

Agustín dijo: "Pocos son los que por fe le tocan, multitudes son las que se agolpan en torno a él". 

Preguntas  

¿Qué diferencia ves entre las multitudes que se agolpan en torno a Jesús y las que se acercan a tocarlo?  

¿Has tenido momentos de temor y temblor que te hayan hecho llegar a Jesús con fe para lograr lo imposible?