Cinco Hábitos Para Un Crecimiento EspiritualEjemplo

DÍA 4

COMUNIÓN CON EL ESPÍRITU SANTO

En romanos 8:26-27; De igual manera, el Espíritu nos ayuda en nuestras debilidades. Es cierto que no sabemos qué debemos pedir, pero el Espíritu ora por nosotros con gemidos tales que no se pueden expresar con palabras. Y Dios, que conoce los corazones, entiende lo que el Espíritu dice, porque pide por nosotros de acuerdo con la voluntad de Dios.

Nos enseña la palabra cuán importante es nuestra comunión con el Espíritu Santo, según el diccionario dice que la palabra Comunión significa, Unión de dos o más cosas en lo que tienen en común.

Sabes la Comunión con el Espíritu Santo denota intimidad, y es que vamos a mantener esa comunión con el Espíritu Santo cuando adoramos, oramos, leemos la palabra, vamos atender el consejo de Dios, nuestro espíritu será guiado por Él y como dice la palabra, ÉL nos enseñará, nos recordará lo que Él padre ha dicho de nosotros.

El Espíritu Santo nuestro amigo, en tiempos difíciles nos sostendrá.

En un tiempo que pasábamos un tiempo difícil con mi familia, decidí mantenerme y seguir firme, muchas veces  las tenía decaídas y cansadas, las rodillas se doblaban, y en mi tiempo con Dios afirmaba su palabra y el Espíritu Santo me ministraba, un día en la Iglesia mientras el Pastor invitado predicaba durante toda la predica me quedaba viendo, y cuando empezó a ministrar me dijo me dice Dios, por cuanto te has mantenido fiel y firme durante la tormenta te he entregado la Victoria, disfrútala porque ya está en tus manos, sabes entendí como el Espíritu Santo intercedió por mí ante el Padre mientras duró la prueba, mientras duró el proceso.

A veces queremos todo instantáneo pero con Dios para mantener esa relación con El Espíritu Santo debemos invertir tiempo para conocerlo, para amarlo, para escucharlo.

No sientas temor el Espíritu Santo estará contigo siempre que le permitas.

Cuando practicamos la adoración, la lectura de la palabra, la oración disfrutaremos de la comunión con el Espíritu Santo, la palabra de Dios dice que Él nos enseñará las cosas, nos consolará y nos recordará lo que el Padre ha dicho.