¿Quién Da Tanto Por Tan Poco? Muestra
Entre tus orejas
¿Cómo es posible que un cerebro que pesa varios kilos, genere pensamientos que pesan toneladas?
Muchas veces nuestras luchas más grandes son internas; las voces que más nos afectan no son las que escuchamos de afuera sino las que tenemos todo el día en nuestra mente. Esta constante lucha entre todo lo que Dios dice de nosotros y lo que las mentiras que estamos acostumbrados a creer nos dicen.
“No eres suficientemente bueno”, “¿En serio crees que Dios amaría a alguien como tú?”, “Eres un caso perdido”. “Ayer viste pornografía ¿Y hoy estás orando? Qué hipócrita”... ¿Sentiste que le dimos al clavo con uno?
Esta es la batalla que sucede entre tus orejas, la batalla que sucede en tu mente.
En Juan 3:16, dice que Dios amó tanto al mundo, a ti y a mi que envió a Jesús para que todos tengamos vida eterna. Pero no se queda ahí. En el siguiente versículo (vs.17) dice que Dios no envió a Jesús a condenar al mundo, sino a salvarlo.
¡Esta es la verdad más grande! No hay condenación en Jesús. No hay nada que te aparte de su amor, ¿Pero por qué dejamos que algunos pensamientos nos hagan creer que si?
En Juan 8:1-11, encontramos una de las historias más asombrosas de la inexplicable gracia de Dios. Los fariseos, que eran los religiosos de la época, habían encontrado a una mujer en adulterio y querían aplicar la ley judía con ella, que permitía apedrearla como castigo.
Esta mujer se encontraba en el polvo, completamente expuesta, rodeada de voces llenas de condenación, listas para castigarla. Puedo imaginar que tal vez algo en ella sentía que se lo merecía y no esperaba que nadie la defendiera, pero en medio de todo el juicio, la voz de Jesús se alzó, y dijo: “...El que nunca haya pecado que tire la primera piedra”. De pronto todos comenzaron a dejar sus piedras en el suelo y a retroceder.
La Biblia dice que los primeros que retrocedieron fueron los de mayor edad hasta que solo quedaron Jesús y ella. Esto me hace pensar que lo mismo sucede con nosotros, una vez que la voz de Jesús interviene en medio de las voces de juicio y condenación, todas las mentiras van retrocediendo, desde las mayores, las que tal vez por años te han atormentado hasta que solo quedan Jesús y tú, su verdad y tú.
Y quedándose solo Jesús y la mujer, él le dice: ¿Dónde están los que te acusaban? ¿Ni uno de ellos te condenó? Ella responde: Ni uno. A lo que Jesús responde: Yo tampoco, ve y no peques más.
Jesús siendo el único que podía condenarla ahí, no lo hizo. Es más, le dio una mejor opción, la oportunidad de volverse a levantar y empezar de nuevo con un mejor enfoque. ¿Te imaginas lo que estaba pasando entre las orejas de la mujer? Tal vez esta era la primera vez que tenía la oportunidad de salir de la prisión en donde la condenación por sus errores la habían metido. Tal vez para ella era algo nuevo poder decidir qué voz escuchar.
Ahora te pregunto: ¿Qué voz tiene más volumen en tu cabeza? ¿Vergüenza y condenación? ¿O la verdad del amor de Jesús? Lee Romanos 8:31-39. No hay nada que te pueda separar del amor de Jesús, no hay condenación. Esto es una verdad y victoria absoluta. La condenación no viene de Jesús, tenemos un enemigo que lo único que puede hacer es envenenar nuestros pensamientos. Recuerda, donde Jesús levanta su voz a tu favor no existe una voz de condenación que tenga poder sobre ti.
¡Esta es la verdad! Jesús ya pagó todo en la cruz por ti, así que todos esos pensamientos ¡son solo mentiras! Deja de darles poder. ¿Qué vida quieres vivir? ¿Una basada en las mentiras entre tus orejas o una basada en la voz de Jesús?
Escribe en un papel todos los pensamientos que te condenan y busca una verdad de la Biblia. Te ayudamos con una: Romanos 8:1.
Acerca de este Plan
¿Alguna vez te has puesto a pensar porque Dios ama a personas que rompen cosas? No tiene mucho sentido, es más, hasta suena escandaloso. ¿Quién da tanto por tan poco? Es un regalo que no merecemos, en otras palabras, es gracia. A lo largo de estos 5 días hablaremos sobre lo que la gracia significa para nuestras vidas.
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Nos gustaría agradecer a caminodevida por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: http://www.caminodevida.com