El Dios verdaderoMuestra

Dios es justo

¿Por qué? En tiempos difíciles deseamos que Dios pueda darnos la respuesta a esa pregunta. Muy pocas veces lo hace, y nos deja preguntando por qué la vida es injusta, por qué cosas malas les suceden a personas buenas, y aún por qué existe el mal.

¿Por qué Dios permite que la obediencia leal pase sin ser recompensado, o que el sueño de toda una vida se desvanezca justo antes de cumplirse, o que un ser amado se muera antes de tiempo? Si Dios es soberano y bueno, ¿por qué el mundo se ve como se ve?

Se ve de esta manera porque tenemos una perspectiva muy limitada. Vemos mucha injusticia, es verdad, pero nuestro panorama es finito.  No podemos entender todo el cuadro—el plan increíble de Dios y Su propósito que se extiende más allá de lo que podemos ver.

“La justicia y el derecho son el fundamento de tu trono, y tus heraldos, el amor y la verdad” (Salmos 89:14).

Recuerda, la Biblia nos enseña que el Dios verdadero es infinitamente bueno, soberano, santo—y justo.

Dios nos ha comprobado que Él es un juez justo y misericordioso. Él puso nuestro castigo sobre Su propio Hijo, Jesús, para que la justicia no cayera sobre nosotros y aún así fuera efectiva.

Cobra esperanza sabiendo que no importa cómo estén las cosas en este momento, Dios ha comprobado—y lo continuará comprobando—que Él es el justo “Juez de toda la tierra” (Génesis 18:25). Al final, Él enderezará todo. 

Mientras tanto, al ser conformados a Su imagen, tenemos que confrontar la injusticia en el mundo, rechazar la venganza, resistir la amargura y el resentimiento, prevenir a otros del juicio final que se acerca, y mostrar a todos la misericordia de Dios. Nuestro Dios justo siempre sabe el marcador y cuida de nosotros.