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 ¿Alguna vez has escuchado dos instrucciones muy diferentes de dos personas distintas sobre lo mismo? ¿O tal vez leíste dos artículos de noticias diferentes que informaban el mismo evento de manera muy diferente? Tal vez te sentiste desorientado y no sabías qué hacer o creer. A veces experimentamos lo mismo cuando se trata de sexo y relaciones. Entre la televisión, las redes sociales, los amigos, los padres y la iglesia, constantemente recibimos mensajes contradictorios sobre lo que está bien y lo que está mal. Incluso cuando conocemos la decisión acertada, puede ser realmente difícil actuar en consecuencia. Afortunadamente, no tenemos que navegar solos para tomar decisiones sabias. En este versículo, el salmista dice que Dios no solo nos guiará al tomar decisiones sabias, sino que también nos dará fuerza. Esta semana, cuando algo en tu vida se sienta abrumador o te enfrentes a una decisión difícil, llévaselo a Dios. Ora y pídele a Dios que te guíe. Respira profundamente. Tal vez incluso repite el versículo anterior una y otra vez. Permítete refrescarte y encontrar fuerza en la presencia de Dios.