Querido hijo...Muestra

No

Querido hijo,

Me encanta bendecirte. Sabes que soy un padre bondadoso, y siempre te doy lo que realmente necesitas. Sin embargo, sé que no te sientes feliz conmigo cuando no te concedo ciertas cosas que me pides, tal vez piensas que estoy ignorando tu oración. Hijo, quiero que entiendas que “no” también es una respuesta. Hay cosas que no puedo darte porque no estás preparado aún. Hay cosas que no puedo darte porque dependerías más de ellas que de mí. Hay cosas que no te doy porque no te las has ganado y tienes que trabajar por ellas. No soy un mal padre, soy un padre que te ama y te protege. Te doy lo que sé que necesitas. Imagina que una madre le permitiera a su hijo hacer todo lo que quiera, o que le diera todo lo que pide. Eventualmente el niño crecería sin límites, sin reglas y se volvería avaro, queriendo cada vez más y más sin pensar en el otro. Como un padre que te ama, quiero lo mejor para ti, y en ocasiones un “no” es lo que puede salvar tu alma. Nunca te he fallado, y tampoco lo haré. Te daré más de lo que pides, pero cuando sea necesario. Te amo, hijo, aunque por ahora mi respuesta sea un no.

 Sinceramente, tu Padre.