Posturas de Adviento: un devocional diario de NavidadEjemplo

Ven, enciende una vela, reúne a tus amigos, familiares y seres queridos. Llena tus mesas, abre las cortinas y deja entrar la luz. 

¡Nuestro Rey ha llegado! 

Dios se ha vestido de carne para habitar entre nosotros. ¡Celebremos el glorioso nacimiento de nuestro maravilloso Salvador, Jesucristo! 

Adorémosle juntos.

Escucha: Hosanna por Josh Garrels

Ora: 

Rey Jesús, te adoramos. Tu vida nos da vida. Nos has llamado cercanos y nos has llamado amigos. En Ti tenemos nuestro aliento, nuestra vida y nuestro ser. Jesús, la humildad de tu venida habla de una historia más grande. Habla de la clase de Rey que eres. Eres un Rey que ha venido, no para gobernar con la espada, sino con el servicio. Dios, a través de tu Hijo, nos has dado vida y vida en abundancia.

¡Ya no necesitamos buscar satisfacción en las cosas que pasan! Ya no necesitamos vincular nuestras identidades a cosas que se marchitan. En ti, nuestro Rey nacido en un pesebre, tenemos todo lo necesario. Oramos, Señor, que a medida que avanzamos hacia este nuevo año, tú nos impulses hacia adelante a través de tu Espíritu Santo para vivir como tú viviste en tu tiempo en la tierra. 

Enséñanos a mantener nuestros ojos fijos en ti, a pesar del ajetreo que compite por nuestra atención. 

Guíanos para levantar nuestra cabeza hacia tu bondad y tu gloria cuando el mundo que nos rodea llene nuestros corazones de pesadez.

Recuérdanos mantener las rodillas dobladas mientras te colocamos diariamente en tu legítimo trono, renunciando a nuestros deseos de hacer que nuestras vidas giren a nuestro rededor.

Inspíranos a vivir con las manos abiertas, dando libremente a los demás de la gracia que nos ha sido dada. 

Y ayúdanos a mantener los brazos abiertos para aceptar con alegría el regalo de la vida que nos has dado, y a adorarte con toda nuestra vida.

Que nuestras actitudes de vida estén siempre impulsando tu Reino hacia adelante, nuestro Príncipe de Paz. Que en este nuevo año que viene, podamos amarte con todo nuestro corazón, alma, mente y fuerzas, viviendo como tú viviste y amando como tú amas. 

Amén.

Esperamos que este Plan te haya animado. Explora otros recursos de Compassion Canada.