Equipadas - Ayer y hoyEjemplo

Hubo muchos obstáculos para evitar que la iglesia primitiva proclamará el evangelio. Fueron arrestados, encarcelados y amenazados de ejecución; pero a pesar de todos los problemas y turbulencias que enfrentaron, se mantuvieron firmes en la difusión del mensaje del evangelio.

Un maestro de la ley llamado Gamaliel se paró frente a los fariseos y maestros de la ley y les recordó algo verdadero: si su mensaje era de origen humano, fallaría, pero si su mensaje y su misión eran de Dios, continuaría.

Somos evidencia de que el mensaje de la iglesia primitiva era de Dios. Los miembros de la iglesia primitiva estaban tan convencidos del mensaje que compartían que estaban dispuestos a morir por él. Sin importarles lo que tenían que enfrentar, no dejaron de proclamar las buenas nuevas: Jesús es el Cristo. De hecho, son buenas nuevas, que cambiaron no solo la iglesia primitiva, sino que también nos cambiaron a cada una de nosotras.

Señor Jesús, gracias por dar a la iglesia primitiva valentía y sabiduría para compartir el mensaje del evangelio. Estoy segura de que ese mensaje proviene de Ti Señor, y no de origen humano. Eres el Hijo de Dios, has quitado los pecados del mundo y eres el único camino para recibir la vida eterna. Dame la valentía para compartir el evangelio cuando me encuentro con oposición. Amén.