Confiando en Dios durante las pruebasMuestra

No lo enfrentes solo

Acepta la ayuda de los demás. Esto es exactamente lo contrario a la naturaleza humana. Nuestra tendencia cuando experimentamos dolor es aislarnos. Nuestra tendencia cuando las cosas no van bien en nuestras vidas es retiramos al aislamiento. No tienes que decirle a todo el mundo por lo que estás pasando, pero hay que decirle a algunos amigos cercanos.

Si eres de los que dice: “Pero yo no quiero que nadie más lo sepa” hay una palabra para ese problema, se llama orgullo o arrogancia. La Biblia dice que Dios resiste a los soberbios. Estás en el lado opuesto de Dios cada vez que te llenas de orgullo. Pero también la Biblia dice: “Dios da gracia a los humildes.”

Necesitas de otras personas en tu vida. Dios nos formó de tal manera que nos necesitamos unos a otros. Ningún hombre es una isla, ninguna persona jamás se ha hecho por su cuenta. Cuando me humillo y comparto lo que está pasando en mi vida con otras personas y ellos pueden orar por mí y me animan, sucede algo maravilloso; una carga que se comparte se reduce a la mitad y una alegría compartida es doble. Sucede todo el tiempo.