Recobrando La ValentíaMuestra

 Alguien dijo, luego de pasar por un tiempo de adversidad: “Me sentí como prestando nuevamente el servicio militar en la infantería de marina. Fue un tiempo, intenso, doloroso, difícil, pero lo puede superar con la ayuda de Dios”.

Las tormentas de las dificultades nos llegan a todos sin avisar y nos obligan a hacer ajustes e incorporar nuevas rutinas y hábitos, que nos permitan permanecer valientes y fieles en nuestras convicciones espirituales y quehacer diario, mientras batallamos contra los sentimientos de duda, temor y enfrentamos los desafíos propios que traen los vientos en contra.

Si bien es cierto que Dios sigue obrando, no solo en el mundo, sino también en nuestras vidas en los tiempos de crisis, también es cierto que estos tiempos nos proveen una oportunidad para actuar con decisión y firmeza, no sólo para tomar sabias decisiones, sino también para hacerle frente a nuestros miedos e inquietudes más profundas.

Miles de años antes de que existieran los derechos laborales, la protección legal o la salud pública, el pueblo Israelita se vio sometido a esclavitud, la vida de un esclavo era dolorosa, sin esperanza y breve. En este contexto creció el Joven Josué, un seguidor de Moisés.

Sin embargo, Josué no solo conocía al Dios de Israel, sino que estaba absolutamente seguro que el Señor estaba con él, con su familia y con su pueblo a pesar de vivir en esclavitud. Esta convicción de fe, fue más que suficiente para que Josué pudiera enfrentar con valentía la salida de Israel de la esclavitud de Egipto bajo el liderazgo de Moisés, explorar la tierra prometida y perseverar en la conquista de la tierra prometida, por muy difícil que fuera la misión de redención que Dios le había encomendado.

“Esfuérzate y sé valiente; porque tú repetirás a este pueblo por heredad la tierra de la cual juré a sus padres que la daría a ellos”.

“Solamente esfuérzate y sé muy valiente, para cuidar de hacer conforme a toda la ley que mi siervo Moisés te mandó".

“Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas”.

Al final querido amigo, la valentía es un valor que se vive día a día y momento a momento en las pequeñas cosas. No es necesario esperar grandes batallas para sacar a relucir nuestro arrojo, basta con defender lo que sabemos que Dios nos ha declarado que es correcto.