Fe InamovibleMuestra

¿QUÉ ESTÁS COMUNICANDO? 

En medio de una crisis lo que comunicamos como iglesia y como hijos de Dios es de suma importancia. La forma en la que respondemos a las autoridades cuando ponen en práctica medidas preventivas habla mucho de nosotros. Y la forma en la que llevamos la carga para ayudar a otros en medio de la necesidad habla más que nuestras prédicas. 

¿Qué estás comunicando?

El versículo de hoy nos recuerda el poder que tienen nuestras palabras. Vivimos en un tiempo en el que una palabra escrita desde un celular puede viajar por todo el mundo a través de las redes sociales. ¿Estás usando tus recursos para ser de bendición o para difundir miedo y negatividad? 

No desaprovechemos las plataformas que hoy en día tenemos disponibles, seamos de bendición para los que nos observan. 

Todos vivimos rodeados de desafíos diariamente, y ser personas de fe no nos libera de pasar por situaciones difíciles, pero sí nos fortalece en medio de todo lo que enfrentamos día tras día. 

Vemos en Job el ejemplo de un hombre que sufrió, que tuvo que atravesar tormentas y dificultades. Pero en medio de esas situaciones él jamás perdió su fe ni retrocedió. Puede que se haya cuestionado algunas cosas, pero nunca se rindió, sino que cultivó una fe inamovible que lo hizo mantener sus ojos fijos en la fidelidad de Dios.

Cuando estás en medio de la dificultas, ¿en qué fijas tus ojos? ¿en lo que tú no puedes hacer o en lo que Dios puede hacer? 

Vemos en Job 1:21-22 que, luego de haber sido cuestionado en su fe hasta por sus amigos y su esposa, él declara: “Desnudo salí del vientre de mi madre, y desnudo he de partir. El Señor ha dado; el Señor ha quitado. ¡Bendito sea el nombre del Señor!”

A pesar de todo, Job no pecó ni le echo la culpa a Dios. Su vida fue sacudida, pero su fe se mantuvo fuerte e intacta, sus ojos fijos en el Señor durante todo el tiempo de pruebas y dificultades.

Frente a la situación que hoy enfrentas, ¿cuál es tu declaración? 

Seamos los ojos que ven la posibilidad en medio de la dificultad, y los labios que proclaman buenas noticias hasta en los lugares más oscuros.