Cuadro CompletoMuestra

¿Alguna vez te has sentido avergonzado por algo que hiciste? Tal vez le dijiste algo hiriente a un hermano, rompiste una regla en casa o te pillaron mintiendo a tus amigos. La buena noticia es que cuando seguimos a Jesús, no tenemos que avergonzarnos de nuestros errores. En su lugar, podemos centrarnos en el hecho de que Dios está obrando siempre en y a través de nosotros para cambiar nuestra historia para mejor. Él nunca deja de amarnos, nunca deja de preocuparse por nosotros y nunca deja de trabajar para ver que nuestras historias cambien para siempre. Así que hoy, pídele a Dios que te ayude a superar tus errores pasados y agradécele por el panorama único que sigue creando para tu vida.