Cómo dejar de preocuparteMuestra
Lo que Jesús dijo sobre la preocupación
En Mateo 6, Jesús continúa Su Sermón del Monte que comenzó en el capítulo 5 y se extiende hasta el final del capítulo 7. En esta conocida enseñanza, Jesús da instrucciones sobre la oración, la ira y el adulterio, así como otros temas. Terminaba de hablar sobre el dinero y las posesiones cuando entra al tema de la preocupación.
Nadie puede servir a dos señores; porque o aborrecerá al uno y amará al otro, o estimará al uno y menospreciará al otro. No podéis servir a Dios y a las riquezas. Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida … Mateo 6:24-25 NLT
Jesús nos dijo que no nos preocupemos porque sabe que nuestra pasión por el dinero quita nuestro amor de servir a Dios. Pero nuestras preocupaciones a veces van más allá de las luchas de dinero. Hay muchas otras que enfrentamos a diario justificando una postura de preocupación. Veamos por qué Jesús nos dijo que no nos preocupemos:
La preocupación no beneficia a nadie
Jesús enseñó que la preocupación es inútil. No produce fruto. No hay nada que venga de ella. La preocupación tiene sentido si es productiva. Pero no lo es. Preocuparse por una situación no evita que suceda. En cambio, participamos a menudo en lugar de tomar la decisión de no hacerlo. (Hablaremos más en el Día 3 sobre cómo superar este ciclo inútil.)
La preocupación es innecesaria
Jesús nos dijo en Mateo 6 que los pájaros en el aire y las flores en el campo están provistos. ¡Y son solo pájaros y flores! ¿Cuánto más se preocupa por nosotros? ¡Una cantidad inmensa! Él se preocupa por nosotros más de lo que se preocupa por otras cosas creadas. Él no murió en la cruz por ellos.¡Murió por nosotros! Entonces, si ellos están provistos, ¿no lo estaremos nosotros?
La preocupación expone nuestra devoción
Preocuparnos por el dinero, las personas, el trabajo o si pasamos nuestro tiempo preocupándonos, a eso nos dedicamos. Debemos dedicarnos a las personas que Dios ha puesto en nuestras vidas y hacer lo mejor en los trabajos que nos han dado. Pero de acuerdo con Mateo 6, debemos buscar el Reino de Dios primero y luego, todo se nos añadirá.
Hay momentos en nuestras vidas en que tenemos algunas preocupaciones lícitas sobre el rumbo de las cosas, ya sea para nosotros o para quienes amamos. El apóstol Pablo dice en Filipenses 4:19 que Dios " ... suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús". (ESV)
La provisión de Dios no significa que tendremos todo lo que queramos o incluso todo lo que creamos necesitar. ¡De hecho, Pablo escribió a Filipenses 4:19 desde la prisión! Pero, él reconocía que todas sus necesidades espirituales se cumplían en Cristo. Lo mismo es cierto para nosotros: cuando permanecemos en Él, tendremos todo lo que necesitamos.
Si te sientes atrapado en este patrón de preocupación, el Día 3 te ofrecerá algunas sugerencias sobre cómo vivir de manera diferente en el futuro.
Reflexiona
- ¿De qué te sueles preocupar? (relaciones, carrera, salud, etc.)
- ¿Qué efectos negativos te ha causado la preocupación?
Acerca de este Plan
Si estás vivo, probablemente has luchado con la preocupación. Algunas personas se preocupan mucho, mientras que otras ocasionalmente permiten que las preocupaciones ocupen sus pensamientos. Sin importar cuán a menudo o qué tanto, es sabio aprender a manejar este monstruo que permitirle robar nuestra paz y secuestrar nuestra fe. Este Plan de 4 días te ayudará a lograrlo.
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