Espíritu Santo: ¿Somos inflamables o a prueba de fuego? Muestra

 Su unción original  

  Usted fue creado, ungido y señalado de modo único por Dios para sus propósitos y para su tiempo y etapa. “Y como tus días serán tus fuerzas” (Deuteronomio 33:25). En vez de preocuparse por lo que no tiene, enfóquese en lo que sí tiene, salga en fe y vea a Dios obrar a través de usted. El día de Pentecostés, los 120 no pidieron una doble unción. Por favor, note: NADIE SALIÓ DEL APOSENTO ALTO CON DOS LLAMAS SOBRE SU CABEZA. Tan solo “asentándose sobre cada uno de ellos” (Hechos 2:3). Pero esta llama representa todo el fuego de Dios: su autoridad, poder y gloria.

Cuando viajo por el mundo, a menudo me piden: “Por favor, ore por mí; yo quiero su unción”. ¿Mi contra pregunta? “¿Cree usted que si le doy mi unción, me iré yo a casa sin ella? Claro que no”. Pero este es un maravilloso secreto: si usted recibiera la unción de Reinhard Bonnke, se convertiría en una copia de Bonnke. Y déjeme decirle: en lo personal no quiero ser una copia de una copia, y Dios tampoco quiere eso para usted.

Si quiere saber algo sobre el carácter de Dios, tan solo piense en la naturaleza. Hay más de 7.500 millones de seres humanos que no tienen la misma huella dactilar, y no hay dos hojas de ningún árbol que tengan la misma estructura. ¿Por qué? Porque Dios no es un duplicador; Él es el Creador. Él solo produce ORIGINALES y no tiene máquinas de duplicar. La llama sobre su cabeza es tan personal que lleva su nombre. Está hecha a medida solo para usted. No le quedaría bien a nadie más. ¡Nadie en la tierra puede servir a Dios exactamente como usted! Usted es único, ¡y también es única su unción!