Tengo Preguntas: ¿que hacemos con la ansiedad?Muestra

Seamos realistas: La secundaria está llena de personas abrumadas, comprometidas y estresadas en exceso. 

Estamos abrumados porque pensamos demasiado, constantemente tomamos decisiones o nos esforzamos por cumplir con las expectativas. 

Estamos comprometidos en exceso porque estamos haciendo demasiado: escuela, deportes, clubes e iglesia.

¡Y estamos demasiado estresados por, bueno, todo lo demás: padres, redes sociales, hermanos, nuestro trabajo después de la escuela y más!

Y todo eso combinado te lleva a experimentar un tipo de fatiga que va más allá de lo físico. Mental e internamente nos sentimos . . . exhaustos. 

Afortunadamente, en medio del caos de la vida, Jesús nos ofrece una invitación:

“Vengan a mí todos ustedes que están cansados y agobiados, y yo les daré descanso” (Mateo 11:28 NVI).

¿Cansado de la locura de la vida? ¿Agobiado por el miedo, la presión de estar a la altura o la inseguridad que dice que nunca lo lograrás? Jesús dice: "Vengan a mí para descansar". Jesús quiere restaurar lo que se ha agotado en tu mente, corazón y alma. 

La verdad es que tu alma está en su mejor momento cuando acudes a Jesús para descansar. Así que esta semana, procura pasar unos minutos con Jesús a diario, no para agregar algo más a tu día ya lleno, sino para descansar un poco. Dile lo que piensas, en qué áreas estás luchando y dónde necesitas ayuda. Y luego simplemente relájate por unos minutos sabiendo que Él está contigo, te ama y se preocupa por todo.