El Menos FavoritoMuestra

ESTER / JESÚS

Menospreciar a las personas por su origen o el color de su piel siempre será un tema delicado. Ha creado tensión entre pueblos desde que tengo uso de razón. Y las personas menos favoritas, racialmente hablando, no son nada nuevo. Veamos algunos ejemplos en las Escrituras.

Ester se convirtió en la reina del imperio más poderoso en la Tierra en su momento y enfrentó oposición dura por su origen. Esa oposición pudo haber terminado en el genocidio contra el pueblo judío y contra su propia vida. Dios usó a una joven judía en un ambiente altamente pagano para salvar a Su pueblo. Dios la usó a pesar de a los ojos de muchos, ella era non-grata por su origen. 

Increíblemente, el mismo Jesús experimentó discriminación. Cuando estaba llamando a sus discípulos a seguirlo, Jesús invitó a Felipe a ser parte de la Gran Comisión. Llenó de entusiasmo, vino donde Natanael y le compartió las buenas nuevas acerca de Jesús de Nazaret. Ahora bien, quiero que pongas atención a la respuesta de Natanael: “¡De Nazaret! ¿Acaso de allí puede salir algo bueno?” Así que, Jesús mismo, el Mesías, el Rey de Reyes experimentó discriminación por su origen. Pero Dios, en su sabiduría, escogió a Nazaret para ser el lugar donde creciera el Salvador de la humanidad.

Entonces, no importa si eres de origen europeo, hispano, afro-americano o cualquier otro, Dios te quiere usar para cosas increíbles. Él no se limita a usar a personas de una raza o nacionalidad. De hecho, entre más grande sean las limitantes en las que creciste, más grande es la gloria que Dios se lleva cuando nos usa. Tu valor no es determinado por el color de tu piel, sino por el precio del que te compró con Su sangre en la cruz.