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ESCUCHAR // Tal vez antes hayas escuchado: que nada nos separa del amor de Dios y pienses: "Qué bien". Pero no siempre parece cierto. De hecho, a veces se siente como si todo tipo de cosas pudieran separarnos del amor de Dios. Como que todos los días tienes que trabajar para estar en el lado bueno de Dios. O que un solo movimiento podría arruinarlo todo. ¿Y si no eres lo suficientemente bueno? Dios te perseguirá. Si alguna vez has pensado estas cosas antes, o si alguna vez has vivido con miedo de hacer que Dios se enoje o se desilusione contigo. . . Si ese eres tú, este versículo de Pablo es para ti. Nada puede separarte del amor de Dios, Nada. Ni la vergüenza. Ni el pecado. Ni arruinarlo. Y aunque lo vuelvas a arruinar. Su amor es constante. Incluso si no SIENTES que lo sea. Puedes contar con eso.