Tras las pisadas de JesúsMuestra
Las bendiciones de la obediencia
Obedecemos como un acto de adoración, como una respuesta, como consecuencia a la bondad y la gracia que nos ha sido dada.
Lo hermoso de la obediencia es que, no solamente nos hace bien o nos conduce por un buen camino, además nos involucra una serie de bendiciones y recompensas.
Dios es un Dios que da y que bendice, nada le alegra más que bendecir a quienes caminan fielmente en obediencia a Dios.
Entonces no sólo es bueno obedecer, pero diríamos que hasta es conveniente.
En Deuteronomio 6: 4 - 5 se nos presenta una de las oraciones más conocidas del pueblo judío, se conoce como el "Shemá", un tipo de oración que era repetido por los israelitas dos veces al día. "Shemá" quiere decir "escucha", pero su significado es más profundo, literalmente significa "escucha y haz caso", involucra obediencia. Esta oración nos enseña que al Dios único le amamos con todo nuestro ser cuando le escuchamos y le hacemos caso.
- ¿En qué te cuesta más obedecer al Señor?
- Si tu vida se midiera por obediencia, ¿qué calificación le pondrías?
- ¿Cuál de los "premios" o bendiciones por la obediencia te suena más atractivo?
Acerca de este Plan
Los discípulos de Jesús tuvieron una oportunidad sin igual, pudieron, ver, escuchar y aprender de Dios directamente de la fuente. Lo que por siglos tantos profetas, sabios y entendidos habían anhelado, estos hombres sencillos lo hacían, como actividad diaria. A través de algunos pasajes emocionantes, tú también puedes seguir al maestro de Galilea, como un discípulo más, caminando, tras las pisadas de Jesús.
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Material preparado por Carlos Alberto Paz, pastor principal de Jazôn. Para mayor información por favor visite: http://www.jazon.info