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Tienes un propósito

Fuiste creado para un propósito. Cuando el Creador de los cielos y la tierra te tejió en el vientre de tu madre, Él te dio un propósito. Esto es importante porque la vida sin propósito no tiene sentido. No confundas la actividad, los logros, o el éxito, con propósito. Algunos piensan: «Mi propósito en la vida es ser rico», eso es factible pero no significativo y puedes perder el cumplimiento del propósito de Dios para ti. Soñamos despiertos con la jubilación y estamos perdiendo el elemento más importante de vivir y hacer que hoy cuente. Algunos se imaginan en una situación mejor, cuando la vida sea buena y pierden lo que Dios tiene para ellos hoy.

Tu propósito es con las personas. Aun cuando no puedo decirte el propósito específico de Dios y su plan para tu vida, puedo decir con certeza que fuiste creado para tener una relación con Él. También fuiste diseñado para bendecir a otros. Cuando se trata solo de mí, nos volvemos narcisistas. Si vives enfocado únicamente en como cubrir tus necesidades y satisfacer tus deseos, perderás de vista tu propósito: ser una bendición dondequiera que vayas. La verdad es que cuando entiendes que tu vida puede hacer la diferencia en otra persona, eso hará que tu vida sea más abundante. No estoy hablando de ser el mejor amigo de todos los que conoces, sino de marcar una diferencia en la vida de alguien que encuentres hoy. Sí, esto puede interrumpir tu vida. Pero te animo a estar abierto y disponible. El engaño es creer que cuando cubres todas tus necesidades, te preocuparás por ayudar a los demás. Eso nunca sucederá. ¿No son nuestras necesidades como un agujero negro?

Así que esta es la situación. ¿Hemos perdido el margen de tiempo en nuestras vidas para bendecir a otros? Vivimos en una paz furiosa, corriendo con horarios, ocupados con nuestros hijos y todas las actividades que se deben hacer para no atrasarlos en la vida. A menudo pensamos: «Invitaría a las personas a mi casa, pero no tengo tiempo». La autora del libro «The Turquoise Table», Kristin Schell, dice: «Sin margen de tiempo en nuestras vidas, la idea de estar presente parece fuera de alcance». ¿Cómo puedo estar presente, sin distracciones? Hoy necesitamos estar conscientes de cuan frecuentemente perdemos la conexión con otros por causa de interactuar con nuestros teléfonos. Imagínate dejando de lado los teléfonos para poder disfrutar del momento con alguien cercano. La gente no necesita la luz de tus dispositivos brillando en ellos. Lo que necesitan mirar es la luz de Jesús brillando a través de nosotros. La luz es una cosa hermosa cuando brilla en lugares oscuros. 

¿Has perdido algo fundamental del diseño de Dios, al no conectarte con las personas? ¿Cómo puede impactar tu vida la de alguien más?