Es obvio que Dios está contigoMuestra

¿Qué lado toma Dios cuando dos de sus hijos pelean?

Al pensar en esto surge una pregunta: ¿qué lado toma Dios cuando estamos divididos?, ¿qué lado toma Dios cuando dos de sus hijos pelean?, ¿qué lado toma Dios cuando los esposos discuten?, ¿será que Dios está del lado de la esposa o el esposo?, ¿qué lado toma Dios con respecto al principio espiritual del acuerdo?: si dos de ustedes se ponen de acuerdo aquí en la tierra con respecto a cualquier cosa que pidan, mi Padre que está en el cielo la hará. Si el esposo o la esposa, se ponen de acuerdo acerca de cualquier cosa aquí en la tierra, mi Padre lo hará. 

El enemigo sabe lo importante que es esta ley espiritual, por eso busca dividirnos y ponernos a pelear, él hace todo lo posible para que existan las peleas entre los esposos, hermanos, padres e hijos. Un reino dividido por una guerra civil, acabará destruido. De la misma manera una familia dividida por peleas se desintegrará. Cuando los esposos están divididos, Dios no toma el lado de ninguno y los dos se perjudican. Dios sabe cuáles son las verdaderas intenciones de nuestro corazón, y puede que no responda las oraciones.

¿Qué es lo que causa las disputas y las peleas entre ustedes? ¿Acaso no surgen de los malos deseos que combaten en su interior? ¿De dónde viene la pelea entre los esposos o familia? De nuestro dañado corazón. 

Desean lo que no tienen, entonces traman y hasta matan para conseguirlo. Envidian lo que otros tienen, pero no pueden obtenerlo, por eso luchan y les hacen la guerra para quitárselo. Sin embargo, no tienen lo que desean porque no se lo piden a Dios. Aun cuando se lo piden, tampoco lo reciben porque lo piden con malas intenciones: desean solamente lo que les dará placer (satisfacer sus propias pasiones o para el beneficio personal).

Hasta que no resolvamos los conflictos entre esposos, hermanos y familia, Dios no tomará partido por ninguno. El enemigo sabe esto y por eso se mete en las iglesias para dividir y ponernos a pelear, especialmente entres esposos porque así no conquistamos nada.