ALIMENTA TU FEMuestra

El fin de los días nos llegara a cada uno, o sea, dicho claramente un día moriremos. 

Ese día otros hablarán de nosotros, serán otros los que contarán nuestra historia y ya no estaremos allí para dar excusas o defendernos si dicen algo incorrecto, o peor aún alguna mentira. 

Pero sabes una cosa: Ese día solamente importara lo que Dios diga de ti. Si, así es. Y puede ser que cuando llegues a tu fin no se hayan cumplido muchas de tus metas, o no hayas cumplido algunas promesas que te han hecho, pero nada de eso detendrá el reloj y entonces te darás cuenta que valió la pena vivir de acuerdo a las enseñanzas de Dios por medio de su Palabra. 

¿Y mis pecados, mi falta de fe en algunas ocasiones, los berrinches que le hice a mis padres? todo eso ¿dónde queda?  Y la respuesta es en el fondo del mar. 

Dios cumplirá su promesa de verte como su hijo pues has confiado en Jesús como tu salvador. Para Dios eres especial, para Dios eres único y día a día espera que lo busques porque quiere tener una relación fuerte y cercana contigo. 

Tomate tiempo todos los días para platicar con Dios, para platicar con Él en oración, te aseguro tu vida no volverá a ser igual, y estarás listo para cualquier situación, incluso para el día que Dios te llame a su presencia.