Oswald Chambers: Alegría - Fuerza en el SeñorMuestra

Cuando los hombres se apartan de la Biblia, Dios es simplemente el nombre dado a las tendencias generales que favorecen los intereses de los hombres: que Dios, Jesucristo y el Espíritu Santo simplemente tienen la intención de bendecirnos y favorecer nuestros intereses. Cuando llegamos al Nuevo Testamento, encontramos exactamente la idea opuesta, que mediante la regeneración nos encontramos en tal armonía y unión con Dios que nos damos cuenta con gran alegría de que estamos destinados a servir a Sus intereses.

Si nos mantenemos en la luz con Dios, nuestra vida es la de un niño, simple y alegre por todos lados. Es suficiente que un niño sepa que su padre desea que él haga ciertas cosas y aprende a usar una fuerza mayor a la suya.

Preguntas para reflexionar: ¿Uso a Dios para promover mis propios intereses o sirvo a Dios para promover los suyos? ¿Uso la Biblia para probar que estoy en lo cierto o para descubrir en dónde estoy equivocado? ¿Estoy contento de saber dónde estoy equivocado para poder hacerme bien?

Citas tomadas de La filosofía del pecado, © Discovery House Publishers