»Dios mío, yo te llamo, pero tú no me respondes; me presento ante ti, y tú apenas me miras. Eres muy cruel conmigo; me golpeas con tu brazo poderoso, me levantas con el viento, y me lanzas a la tormenta, y un día me arrojarás a la tumba, que es nuestro destino final. »Yo nunca le negué ayuda a quien me la pidió. Al contrario, he llorado con los que sufren, y me he dolido con los pobres. Pero vinieron los días malos cuando esperaba mejores tiempos; llegaron los días de sombras cuando esperaba la luz. Todo el tiempo estoy inquieto; me enfrento a días de aflicción. Estoy triste, como un día nublado, pues pido ayuda a mi gente y los jefes no me la dan. Las lechuzas y los chacales son mis amigos y mis hermanos. La piel se me pudre y se me cae a pedazos; estoy ardiendo en fiebre. De mi arpa y de mi flauta brotan notas de tristeza.
Leer Job 30
Compartir
Comparar todas las versiones: Job 30:20-31
¡Guarda versículos, lee sin conexión, mira videos didácticos y más!
Inicio
Biblia
Planes
Videos