El Viaje del Legado Muestra

Satisfecho en todo.

Cuando se trata de dinero, tenemos tres lentes a través de las cuales podemos ver lo que tenemos. Dos de ellas son insanas, incluso tóxicas. La tercera representa un acercamiento más apropiado a lo que Dios nos ha dado.

Una manera en la que podemos elegir ver la riqueza es con un espíritu de orgullo, que dice que todo lo que tengo viene de mí. Mi trabajo duro lo hizo posible. He luchado con esta manera porque aprecio el trabajo duro y la confianza en uno mismo, pero el espíritu de orgullo no tiene nada que ver con el Espíritu de Dios.

También podemos ver la riqueza con un espíritu de pobreza. Este espíritu dice que todo lo que tengo es malo porque viene del diablo. Se alimenta de la culpa y la vergüenza, y se está extendiendo rápidamente por toda nuestra cultura, incluso dentro de la iglesia. Pero el espíritu de pobreza ofrece otra visión distorsionada de nuestros recursos.

La visión sana y bíblica de la riqueza es el espíritu de gratitud. Este espíritu reconoce que todo lo que tenemos proviene de Dios y Él espera que lo usemos para su gloria. La gratitud me empuja a cambiar mi árbol genealógico y a hacer una diferencia en el mundo.

Creo que Pablo entendió el espíritu de gratitud. De hecho, creo que lo alimentó para poder experimentar alegría en cada situación. En Filipenses 4:11 dijo que había aprendido a estar satisfecho independientemente de sus circunstancias. Eso suena realmente bien, pero el hecho de que escribiera esas palabras desde la cárcel nos recuerda que no fue solo una teoría para él. Lo vivió.

Estar satisfecho en todo no es fácil, pero adoptar el espíritu de gratitud puede hacer una gran diferencia en tu vida. Si te estás quedando sin satisfacción en estos días, verifica si también te estás quedando sin gratitud. Las dos van de la mano porque el Viaje del Legado es un viaje de satisfacción.