Confianza, empuje y descansoMuestra

Empujar

Durante los últimos días, hemos estado explorando la tensión que los cristianos debemos afrontar en nuestro trabajo, entre confiar en Dios y forzar para que las cosas sucedan en el trabajo que hemos escogido. Como vimos ayer, Salomón presenta una secuencia para guiar nuestro pensamiento en este tema, comenzando por encomendar nuestro trabajo al Señor. Proverbios 16:3. En el V. 9 del mismo capítulo, Salomón nos insta a planear, diciendo, “El corazón del hombre traza su rumbo, pero sus pasos los dirige el Señor” ‭Proverbios‬ ‭16:9‬ ‭(NVI‬‬).

Sí, Dios nos ha llamado a confiar en Él, pero también gentilmente nos ha dado mentes para planificar y ejecutar. Una vez que hemos entregado nuestro trabajo al Señor, estamos llamados a planear, a trabajar "como para el Señor” Colosenses‬ ‭3:23‬ ‭(NVI‬‬).

Con mucha frecuencia, me temo que los cristianos nos enfocamos demasiado o en confiar o en empujar. Algunos cristianos usan "Esperando en el Señor" como una licencia para la pereza bíblica, mientras otros empujan tanto que no son saludables física, espiritual y emocionalmente. La belleza de Proverbios 16:9 es que claramente bendice acoger la tensión entre estas dos verdades. Sí, debemos reconocer que "el Señor establece nuestros pasos", pero también es correcto y bueno para nosotros "planear nuestro propio curso" diseñar, construir, estructurar, desarrollar, pintar, innovar, escribir, anunciar y vender.

Nuestro trabajo es una de las principales formas en que amamos a nuestros vecinos y servimos al mundo. Recuerda, el trabajo existía antes de la Caída en el Jardín del Edén. El trabajo es una cosa naturalmente buena, diseñada por Dios para revelar Su carácter y amar y servir a otros. Debido a esto, la ambición por nuestro trabajo que impulsa nuestro empuje puede ser algo bueno. Pero como veremos mañana en el día final de este Plan, es solo cuando empujamos, acompañado de confiar en Dios, que encontraremos un verdadero descanso.