Libre de toda ofensaMuestra

Un mundo color de rosas

Tengo unos padres que han consagrado sus vidas a Dios aun antes de que yo naciera, por lo cual mi mundo era lo más parecido al color rosa, a la morada celestial.

Mi mamá me decía palabras de afirmación todos los días, mi papá nos recitaba la Biblia continuamente y con mi hermana jugábamos “al culto”. Ya puedes imaginarte la película.

Pero el mundo fuera del hogar era muy distinto, cuando tuvimos que mudarnos con mi familia a otra ciudad la vida se empezó a volver algo complicada para mí. Por supuesto que fui víctima del bullying, y las ofensas comenzaron a llegar a mi corazón. Iba creciendo y el mundo cada vez se ponía más turbio que colorido, por el pecado que abundaba.

Un pastor de adolescentes dio una charla en un campamento al que asistí y dijo algo que me marco para siempre: “Siempre te van a ofender, pero tú decides que hacer con la ofensa”.

Oración

Señor vivo en un mundo caído, la ofensa está a la orden del día. Me ofenden donde voy, pero en ti yo no soy una víctima. Blinda mi corazón con tu amor, para que sea rápido al perdonar y al pedir perdón cuando ofendo a alguien.

Refreno mi lengua de hablar el mal y mis labios de proferir engaños; me aparto del mal y hago el bien; busco la paz y la siga.

En el nombre de Jesús. Amén