Profundamente amadoMuestra

No tienes que vivir tan cargado. Dios tiene mucho más para ti. Él nos invita a cada uno de nosotros a conocerlo de verdad y a vernos a través de su mirada. Quiere que vivamos con más ligereza y libertad.

Algunos de nosotros hemos estado viviendo en piloto automático: sin conectar con Dios ni con nuestras propias vidas. Sentimos que nuestras vidas no son tan valiosas como las de otros, que somos demasiado diferentes o que no somos lo suficientemente diferentes. Nos sentimos invisibles y sin importancia. No creas las mentiras del enemigo.

Esto es para quien se sienta como una minucia, error o en segundo lugar: eres más de lo que te han dicho. Dios te llama elegido (1 Tesalonicenses 1:4).

No estás aquí por casualidad, porque alguien fue despedido, alguien renunció, alguien murió o porque alguien cometió un error. No estás aquí porque Dios estuviera creando humanos en masa y tú simplemente formaste parte del envío de esta generación. Estás aquí porque fuiste elegido para este momento en el tiempo, justo donde estás y tal como eres, porque el Creador del universo decidió que era importante que estuvieras aquí.

En 1 Corintios 12, Pablo nos dijo que todos somos partes vitales del mismo cuerpo, el cuerpo de Cristo. El versículo 18 dice “En realidad, Dios colocó cada miembro del cuerpo como mejor le pareció”.

Esto significa que Dios te ha colocado intencionalmente precisamente donde estás. Tu función en tu familia es importante. Tu papel en tu grupo de amigos es importante. Tu personalidad es esencial. Dios te eligió para las personas que te rodean. Quién eres realmente es un regalo de Dios para el resto de nosotros.

Elegido. Ese es tu nombre.

Esto es para quien se sienta poco apto para mostrar el amor de Dios en su vida diaria, que piensa que su historia no es lo suficientemente buena, o que su vida nunca podría tener un impacto: eres más de lo que te han dicho. Jesús te llama su mensajero para el mundo (Hechos 1:8).

Somos el plan A de Dios, su mejor plan, para llevar luz a un mundo oscuro.

El apóstol Pablo dijo, “Así se ha confirmado en vosotros nuestro testimonio acerca de Cristo” (1 Corintios 1:6).

Son tus detalles, historia, personalidad y experiencias de vida los que te equipan de manera única para revelar el amor de Dios en tus relaciones reales.

Mensajero de Dios. Ese es tu nombre.

Para finalizar nuestro tiempo devocional juntos, quiero animarte a seguir luchando por pasar tiempo real con Dios. Sigue esforzándote por hablar con Él, ser sincero con Él, profundizar en su palabra y hacer que su voz sea la voz más fuerte en tu vida.

Hoy, quiero dejarte con esta verdad:

Dios no solo te está dando un nuevo nombre. Te está revelando lo que siempre has sido: amado, elegido, deseado y por lo que vale la pena luchar.

Esta es la verdad: fuistes amado todo el tiempo.

En mi nuevo libro, comparto más herramientas prácticas sobre cómo reconectar con Dios, saber quién eres y vivir así cada día, You Are More Than You've Been Told. Juntos, podemos avanzar en nuestro viaje de sanación y libertad.