¿Para Qué Estamos en La Tierra?Muestra

DIA 3 - CAPACITADOS EN AMAR

“Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente y contodas tus fuerzas. El segundo es: ama a tu prójimo como a ti mismo. No hay otro mandamiento más importante que éstos.”Marcos 12:30-31 NVI

Una de las excusas que más escuchamos en la actualidad es la de que “no podemos dar de aquello que no recibimos” y lo sabemos, pero, esta excusa se queda anulada cuando recibimos a Cristo en nuestra vida. Aunque algo nos falte o alguien nos haya fallado, necesitamos creer en la verdad de que estamos equipados por Cristo para ser diferentes, porque él nos convierte en fuente de vida por medio de Su amor. Él decidió amarnos primero.

La verdad es que es más fácil amar solo a los que nos caen bien, pero el sacrificio de Jesús nos estira e invita a dar la milla extra, haciendo del amor un estilo de vida en sus discípulos y no solamente un estado del alma. Podemos conocer o tener a alguien en nuestra vida que no nos caiga bien o hasta nos haya hecho daño, pero, siento decirte: es nuestra obligación amarlo.

En el relato de Marcos 12:30-31, Jesús nos da la clave para una vida extraordinaria en esta tierra: “amar al Señor con todo lo que somos (corazón, alma, mente y con todas las fuerzas) y al prójimo como a nosotros mismos.” Jesús nos invita a ser parecidos a Él por medio del amor y jamás nos daría esta dirección, sin antes abrir el camino para que pudiéramos pasar. El deseo de Dios es que Su amor al mundo sea conocido por medio de nosotros.

Te quiero contar un breve testimonio. Cuando era niña, siempre escuchaba a las personas de mi iglesia decir que Dios me amaba y por muchos años no entendía porque este amor me dejaba pasar por tantas circunstancias difíciles a solas, pues así me sentía. Es cierto que yo era muy amada por Dios, pero todavía no tenía conocimiento de Su amor. Sin embargo, años más tarde, en otra iglesia y en otra circunstancia muy difícil en mi vida, recibí este amor de una manera tan tangible y totalmente sencilla; que los que me conocen, saben el impacto que ha causado en mi vida, simplemente porque personas se dispusieron a hacer del amor de Dios un hecho concreto en vida y no solamente palabras, actuando directamente en lo que necesitaba. Me sentí tan amada, amparada, segura y cuidada. Dios estaba ahí y lo podía sentir por medio de la vida de estas personas; esto ha cambiado mi vida de manera tan extraordinaria que ha dejado huellas profundas para que ya jamás dude de su amor.

¿Por qué te estoy contando esto? Porque somos la respuesta de Dios al mundo cuando decidimos poner en práctica:amar al prójimo como a nosotros mismos, haciéndolo tangible en la vida de personas Nadie desea el mal para sí mismo, por eso Jesús nos dio tan poderoso mandamiento; pidiendo que el amor fuera la tarjeta de presentación de sus hijos. El amor crece, florece, multiplica, empodera, llena, renueva, fortalece, consuela, porque no conoce límites. Solo necesita corazones dispuestos a darlo. Fíjate en esto: Cuando todo fallar, aún queda el amor.

“No estás aquí en el mundo para ti mismo, has sido enviado aquí para otros. ¡El mundo te está esperando!”(Catherine Booth)

Oramos: Por la vida de Mamasaliu, su esposa Karen y sus hijas, responsables por la misión en Guinea.