Simplemente Navidad, una versión Youversion de cinco días sobre cómo recuperar la paz de las fiestas, de Tama FortnerMuestra

No es parte del plan

Escritura: Miqueas 5:2; Lucas 2:1-7; Filipenses 4:19

La vida ya era muy diferente de la forma en que María esperaba que fuera. Como una joven futura madre, seguramente debe haber esperado tener a su bebé en medio de las comodidades familiares del hogar. Pero un decreto de un lejano emperador romano también cambió eso. Sin más remedio que cumplir, ella y José partieron hacia Belén, con destino al establo de un extraño.

Puede que no haya sido lo que María esperaba, pero era lo que el Señor había predicho (Miqueas 5:2). Y así vino a nacer el Hijo de Dios en Belén.

A veces, especialmente, al parecer, durante la temporada navideña, nos encontramos a merced de cosas que escapan a nuestro control. Nuestros planes son cambiados por la enfermedad, la tormenta y las circunstancias, y no tenemos más remedio que cumplir. En lugar de estresarte por lo que se suponía que debía ser, detente y considera lo que podría ser.

¿Es posible que esta interrupción de nuestros planes cuidadosamente trazados sea parte del gran plan de Dios? ¿Podría Él usar esta enfermedad, esta tormenta, esta circunstancia para obrar en nuestras vidas, en las vidas de nuestros seres queridos, para un bien mucho mayor?

Después de todo, Belén puede no haber sido parte del plan de María "antes de que el ángel viniera y cambiara todo", pero era parte del plan perfecto de Dios.

Señor, cuando mis propios planes cambien, ayúdame a confiar en Tu plan perfecto. Amén.

Recuperando la Navidad

Durante años, mis hijos espolvoreaban avena cruda mezclada con un poco de brillantina en el jardín delantero en Navidad. Sirvió como luces de aterrizaje brillantes y como un sabroso refrigerio para los renos de Papá Noel. Era una de mis tradiciones favoritas. Hasta que me di cuenta de que ya no era uno de ellos. Las tradiciones pueden ser hermosas y fuente de dulces recuerdos. También pueden estrangular la alegría de las celebraciones si han sido superadas, están acompañadas de demasiados ojos en blanco o se vuelven más estresantes que gratificantes. Este año, haga un balance de las tradiciones de su familia. ¿Cuáles son queridas e importantes? ¿Cuáles necesitan un poco de renovación y refrescamiento? ¿Y cuáles necesitan ser pateados a la acera?