Conocido: 10 días para descubrir tu identidadMuestra
¿Hay alguien realmente importante que haya recordado tu nombre en una conversación? Tal vez fuera un nuevo amigo, el camarero de Starbucks, o tu amor del instituto. ¿Recuerdas lo bien que te sentiste cuando fuiste reconocido por tu nombre en esa situación? ¿Recuerdas qué bien te sentiste al escuchar la voz de alguien al que admiras decir tu nombre, o al acordarse de ti, o al reconocerte o hacerte un cumplido? Esto hace que te sientas conocido e importante.
Así se siente también en estos versículos de Juan 10. Jesús nos está diciendo que si nos damos a Él y escuchamos Su voz que Él nos conocerá. Imagina al Salvador del mundo sabiendo exactamente ¡cómo suena tu voz!
Para que alguien conozca tu voz, tienes que tener una relación con ellos. Piensa en ello; ¿si tuvieras la voz grabada de todos tus familiares y amigos y después tuvieras que adivinar de quién es la voz de quién, podrías hacerlo? Te apuesto a que podrías adivinar la mayoría de ellas. ¿Por qué? Por que hablas con ellos todos los días, ¡cada día! De la misma manera es con Jesús; ¡Entre más tiempo pases con Él, más conocerás Su voz! Una vez escuché una cita que me cambió completamente la forma de pensar sobre la voz de Dios. Decía: "No puedes quejarte de que no escuchas la voz de Dios si tu Biblia está cerrada." ¡SHEEEEESH! Esa frase me golpeó la primera vez que la escuché. ¿Cómo se supone que vamos a oír la voz de Dios si no estamos en su Palabra, leyendo sus palabras y pasando tiempo con él en oración y adoración? No podemos, ¡y no lo haremos!
La buena noticia es que ¡Dios quiere conocerte! Él quiere conocer tu voz; Él quiere que seas parte de Su equipo. Él quiere todo de ti—no solo las partes lindas—¡todas las partes!
Jesús quiere que conozcas la voz que Él creó en ti, pero para desbloquear la voz de tu propósito tienes que conocer primero Su voz. Sé una oveja; sigue a tu Pastor. Sigue a Jesús, y nunca sabrás lo que es ir a un sitio sin alguien que conozca tu voz.
Escritura
Acerca de este Plan
Puede ser fácil concentrarse en aquello por lo que eres conocido y olvidar por quién eres conocido. La palabra de Dios tiene mucho que decir acerca de ti, quién eres y de quién te hizo para que fueras. Este devocional de 10 días te ayudará a emprender el viaje para descubrir tu verdadera identidad.
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