La muerte no es mi dueñaMuestra

INDEPENDIENTEMENTE DE LAS CIRCUNSTANCIAS, ¡ERES UN VENCEDOR!

En el estudio de ayer, compartí que mi esposo sufrió una amputación del antebrazo.  Aquella tarde cuando lo trajeron de vuelta a su habitación despues de recuperarse, algunos familiares y un par de amigos hicieron cola en los pasillos para darle la bienvenida.  En el momento en que nos vio, tomó su única mano y levantó su pulgar, con una gran sonrisa.  Comparto esto porque en ese momento Dan no estaba pensando en lo que perdió, sino en los años que estaba ganando.  ¡Eligió la vida!

Después de unos días en el hospital, nos dirigimos a casa hacia un nuevo comienzo.  Una nueva forma de aprender a hacer las cosas. Dan veía su pérdida como un desafío para aprender a ser creativo y descubrir maneras de hacer las cosas por sí mismo.  Algunos se molestaron conmigo porque no hice todo por él, pero eso no era lo que él quería.  Quería ser el mismo Dan con o sin un brazo. 

" Todo lo puedo en Cristo que me fortalece". Filipenses 4:13

¿Realmente creemos esta Escritura y la aplicamos a nosotros mismos?  Este Plan es para aprender a usar la Palabra de Dios para ayudarnos a vivir la vida al máximo, incluso durante la pérdida.  Si perdiste tu trabajo, te deja sin aire.  Si alguien a quien amabas y pensabas que sería tu compañero de vida te pide el divorcio, experimentas rechazo y traición.  Si el médico te da un diagnóstico poco favorable, el miedo y la ansiedad aumentan.  Si tu cónyuge muere, sientes que parte de ti ha muerto. 

No quiero dar la impresión equivocada ni sacar el significado de este versículo fuera de contexto.  Cosas malas siguen pasando a la gente buena.  Cuando el apóstol Pablo hizo esta declaración, había soportado muchas dificultades, sin embargo, a través de todas ellas, confió en Cristo.  Cristo nos empodera a través de nuestro espíritu, pero el versículo no implica que solo porque somos salvos podemos doblar al hierro con nuestras manos, por así decirlo.  Significa que si confiamos en Dios, Él nos dará la fuerza que necesitamos para superar nuestra pérdida.

"Independientemente de tu circunstancia, ¡eres un vencedor!"

¿TE LO PUEDES IMAGINAR?

Toma el significado de lo que dicen las escrituras y decláralas sobre la cruz que sientes que estás llevando.  Cambia tu perspectiva de cómo miras a lo que estás pasando.  Agárrate y empápate de las grandes bendiciones que tienes y reflexiona sobre lo que te anima, en lugar de obsesionarte con lo que quiere hundirte. 

LO QUE APRENDIMOS HOY DEL ESTUDIO:

• La vida nos pasa a todos y todos nos enfrentaremos a cosas no deseadas con las que lidiar.

• Podemos detenernos en lo malo y hundirnos en lo más profundo o podemos detenernos en las bendiciones que tenemos para animarnos durante los momentos difíciles.

• Sobre todo, debemos confiar en que la Palabra de Dios es verdadera y depender de Él para darnos la fuerza adecuada para nuestro tiempo de necesidad.

• Eres mucho más que tu circunstancia; ¡eres un vencedor!