Dinámicos: una vida que vale la pena vivirMuestra
Hoy tengo un reto para ti. Haz una lista de las cualidades que te gustaría que tu mejor amigo tuviera. ¿Te gustaría que ese amigo fuera un buen oyente? ¿Servicial? ¿Que tuviera buen sentido del humor? ¿Que fuera amable?
Después de hacer la lista, ¡conviértete en esa persona! ¡Conviértete en el amigo que te gustaría tener!
Si yo hiciera una lista de los atributos que deseo profundamente en un amigo, creo que la lista de Pablo que se encuentra en Efesios 4:32 coincidiría con la mía. Y, por tanto, hoy, voy a convertirme en esa persona.
Voy a ser amable con la gente que hay en mi vida. Voy a utilizar palabras y realizar acciones amables. Incluso voy a empezar a pensar con amabilidad en las personas que hay en mi vida. ¡Qué increíble es comprender que el Padre tiene pensamientos amables de mí todo el día! Tengo que empezar a pensar como mi Padre. La bondad siempre toma la iniciativa y, por lo tanto, voy a ser amable con firmeza.
Voy a ser cada vez más compasiva. No voy a juzgar a otros ni a intentar controlar sus acciones, sino que voy a ser compasiva hacia ellos y a esforzarme en ser comprensiva con sinceridad. El corazón tierno del Padre hacia mí me llena de humildad, y voy a recordarme a menudo que disponer de un corazón tierno y demostrarlo es cosa de familia.
Voy a perdonar a otros de manera constante y generosa. No voy a aferrarme a las heridas o al resentimiento cruel, sino que voy a dar paso a que el perdón generoso y desinteresado del Padre fluya a través de mí. Voy a recordar a menudo que es más divertido perdonar. Voy a proclamar el perdón con mi boca antes incluso de sentirlo en mi corazón. ¡Voy a ser la persona más extraordinariamente clemente de toda mi generación! Voy a perdonar mucho porque Aquel que más me ama y mejor me conoce me ha perdonado mucho.
Cada rasgo de personalidad que estamos llamados a abrazar, cada acto de bondad o amor y cada palabra de compasión o ternura es un reflejo revelador de Jesús en nosotros. ¡Has sido invitado a vivir con el propósito del evangelio y a demostrar el carácter de Dios a través de cada célula de tu cuerpo! Has sido llamado a mostrar y compartir de manera dinámica lo que Dios es capaz de conseguir a través de una persona común. ¡Ahora hazlo!
Aplicación práctica:
Escribe a Carol a carol@carolmcleodministries.com y dile cómo puede orar por ti para que vivas una vida dinámica y abundante.
Escritura
Acerca de este Plan
Todos podemos elegir ser dinámicos, y ese tipo de vida empieza por imitar a Jesús. Cada rasgo de la personalidad que estamos llamados a abrazar, cada acto de amabilidad o amor y cada palabra de compasión o ternura es un reflejo que revela a Cristo en nosotros. Estamos llamados a mostrar y compartir lo que Dios es capaz de conseguir a través de una persona común.
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