Una sacudida de gozoMuestra

Jesús atravesó pruebas y circunstancias difíciles mientras vivió en la tierra como un hombre. La cruz fue algo más que una prueba y algo más grande que una inconveniencia. ¡La cruz era verdadero dolor! ¡Era verdadero sufrimiento! Era la agonía más grande de todas las conocidas por la humanidad. ¿Cómo pudo Jesús permanecer en la cruz y soportar el tormento del dolor físico al que fue enfrentado?

Superó la cruz, incluso siendo despreciado en su dolor, porque el gozo estaba puesto delante de Él. ¿Cuál era el gozo que Jesús vio cuando estaba en la cruz? ¿Cuál era el gozo extraordinario que le mantuvo enfocado a pesar de que el dolor era demasiado para poder ser soportado? El gozo que dio a Jesús la fortaleza para seguir adelante eras tu... y era yo. ¡Nosotros somos Su gozo y Él es nuestro gozo!

Jesús sabía que tenía que morir para que nosotros pudiéramos vivir... ¡Eso era puro gozo para Él! Sabía que tenía que ser clavado en la cruz para que nosotros pudiéramos ser libres del dolor, las adiciones o la depresión... ¡Eso era un gozo indescriptible para Él! Jesús sabía que Su cuerpo tenía que llevar el dolor de una muerte horrible para que nosotros pudiéramos ser sanados... ¡Y para Él eso era era puro gozo!

¿Le gustaba a Jesús lo que tenía que atravesar? NO... la Biblia nos cuenta que él lo quería evitar... pero lo hizo porque te llamó "gozo". ¡Podemos tener gozo porque le tenemos a Él!