Posturas de Adviento: un devocional diario de NavidadMuestra
La Navidad es una celebración de la encarnación de Jesús. Es una celebración de Su elección de hacerse humano y estar con nosotros en el quebrantamiento y la redención de nuestra carne.
Pablo, en su carta a los Filipenses, nos invita a tener la misma mentalidad que Cristo “tomando forma de siervo” a través de la humildad y la encarnación.
La traducción de Reina Valera 1960 lo expresa así: “Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros” (Juan 1:14).
Lo que vemos en Jesús es que al servir a los demás la proximidad y el estar con es importante. La autora Ann Voskamp dice: “La presencia rompe el quebrantamiento”.
En el quebrantamiento de nuestro mundo, el ejemplo que nos da Jesús es el de la encarnación, estar con nuestro prójimo, con aquellos que no son como nosotros, con los que sufren, con los perdidos y los menos favorecidos en la sociedad.
Jesús se deja la piel. No se trata de humanitarismo de sillón, ni de un Salvador indiferente. Para Jesús, asumir la naturaleza de siervo significa estar con nosotros.
Reflexiones:
- ¿Qué significa para ti “encarnarse”?
- ¿Qué oportunidades tienes de encarnarte en tu comunidad en este tiempo y en el próximo año?
La naturaleza misma de un siervo es estar con otros. Deja que tu presencia, llena del amor de Cristo, rompa hoy el quebrantamiento.
Escritura
Acerca de este Plan
La postura que adoptemos ante la Navidad marcará la diferencia en nuestra experiencia del milagro del Adviento. Déjate inspirar para rendirte a Jesús, volver a centrarte en Él y abrazar la gracia de nuestro Rey en este devocional diario de 4 semanas mientras adoptas cinco posturas diferentes: Ojos fijos, Cabeza alta, Rodillas dobladas, Manos abiertas y Brazos abiertos.
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