Posturas de Adviento: un devocional diario de NavidadMuestra

Cuando tenemos miedo o nos sentimos abrumados por el mundo que nos rodea, nuestra reacción instintiva tiende a ser la de retirarnos y evitar las cosas que nos causan dolor. 

Todos tenemos algo a lo que acudir primero antes de ir a Cristo. Podría ser la televisión o las redes sociales, la comida u otros caprichos. 

Estas cosas no son malas en sí mismas, pero cuando las usamos como curitas para consolarnos, descubriremos que el consuelo es sólo temporal. Se aleja flotando como un barco de pesca atado a un guijarro. 

Lo que tendemos a olvidar en estos momentos es que Dios no está lejos de nosotros. De hecho, Él está en esto con nosotros. Él está en todo esto con nosotros: el dolor, las heridas, las cicatrices, la confusión, el cuestionamiento. 

Reflexiones:

• ¿Qué hábitos has cultivado que te impiden mirar a Cristo cuando necesitas consuelo?
• ¿A dónde vas cuando te sientes abrumado por tu dolor o la pesadez del mundo que te rodea? 
• ¿Qué guías puedes implementar en esta temporada navideña para ayudarte a cultivar el hábito de buscar consuelo en Cristo en lugar de consuelos falsos?

Dios está presente y listo para levantar tu cabeza lejos de las falsas comodidades que te rodean y hacia su esperanza duradera. ¡Búscale hoy!