Hogares encendidosMuestra

 El Cielo gobierna 

El primer paso para encender el fuego y que tu hogar se convierta en un altar para el Padre es que le reconozcáis como quien tiene la autoridad en la casa. A Nabucodonosor se le dijo que su reino estaría firme cuando reconociera que el Cielo gobierna, que no hay otra autoridad sobre la del Padre. 

Pedro nos dice que somos una nación espiritual, la cual vive en una nación terrenal. Nos sujetamos a las leyes del país donde vivimos, pero conscientes de que tenemos una ciudadanía superior. Todas las naciones de la tierra tienen un gobierno natural. Ese gobierno es el que establece leyes y esa legislación es la que determina, en parte, la cultura del país. El sujetarnos a las leyes del cielo establece una cultura en nuestro hogar. Esas leyes son internas, escritas en nuestros corazones; leyes como «amarás a tu prójimo», «perdonarás a quien te ofende», «hablarás con amabilidad», son las que nos marcan desde dentro y establecen una cultura familiar: si tus hijos te ven reaccionar con paz en las adversidades, con sabiduría en las encrucijadas, con mansedumbre en las afrentas, se formará una cultura que demostrará el gobierno del Cielo en tu hogar. Los capítulos de Mateo 5 al 7, el Sermón del Monte, son como la constitución de Reino. Allí encontrarás principios básicos para vivir por ellos.

El Cielo gobierna cuando no se hace como lo dice tal persona o como lo aprendí, sino como el Padre lo establece. Cuando no se hace mi voluntad sino la suya. Los conflictos se trabajan de otra manera. Por ejemplo, una pareja puede tener una visión diferente sobre algún tema, pero si los dos se dejan gobernar por Dios, no impondrán su punto de vista sino que, en humildad, consultarán qué dice el Señor sobre eso, sin dar lugar a la división o la discordia, sino preservando el vínculo del amor en paz.

Que los que componen tu hogar hagan un pacto de dejar que las leyes de Dios gobiernen su casa es la chispa que enciende el fuego. Que se pongan de acuerdo en que, en cada situación, buscarán que Él reine, lo mantendrá encendido.

DESAFÍO

· Haced un pacto familiar de vivir la cultura del Reino en casa, consultando a Dios ante cualquier circunstancia.

· Leed y estudiad juntos Mateo 5, 6 y 7 buscando principios de Reino y cómo vivirlos.

· En cada desafío que surja, como familia preguntad: ¿Qué quieres, Señor?