Guía tu mente, guarda tu corazón y cuida tu lenguaMuestra

Ahora que sabes lo que significa tener una mente renovada que piensa en los mismos pensamientos de Cristo, ¡es hora de un trasplante de corazón del mejor tipo! Es hora de que le hagas lugar al corazón de Dios en lo más profundo de ti. Dios quiere remover tu corazón duro, encallecido y desgastado y reemplazarlo con Su corazón perfecto.

La palabra hebrea traducida“corazón” en este versículo es leb, que se define como “el alma, el asiento de la vida, el asiento de los sentidos, las emociones, y afectos; el asiento de la voluntad y el propósito". Sobre la base de esta definición, podemos concluir que el corazón es la parte de la estructura humana que determina cómo actuará una persona en cualquier situación de la vida; el corazón también es un termómetro emocional y regula hasta qué punto expresamos nuestros sentimientos respecto a personas, eventos y circunstancias.

¡El problema con tu corazón es que no quiere ser protegido! Tu corazón está decidido a expresarse con entusiasmo y, a menudo, con gran dramatismo. Tu corazón quiere desahogarse y exagerar y dramatizar cada situación de la vida. Pero la Biblia no dice que “expreses” tu corazón; dice que “guardes” tu corazón.

La decisión de guardar tu corazón con honor y fidelidad afectará todos los demás aspectos de tu vida. Las cosas que permites que entren en los rincones de tu corazón determinarán cómo actúas y, sin duda, determinarán tu reputación. No solo debes controlar lo que puede entrar en tu corazón, sino que también debes proteger lo que puede salir de él. Por lo tanto, tu capacidad para proteger los límites de tu corazón determinará perpetuamente los límites de tu propia vida.

Guarda fielmente tu corazón, y te convertirás en una mujer de Dios estable y poderosa que es capaz de navegar los desafíos y las dificultades de la vida sin someter a otros a emociones inestables y desprotegidas. El legado que dejes continuará por generaciones más allá de la "descripción" en tu lápida, y serás conocida para siempre como una mujer virtuosa y honorable. ¡Cuida tu corazón por encima de todo, y tendrás el placer de vivir una vida abundante y gozosa!

Aplicación personal: Basándote en lo que has leído, ¿cómo describirías el valor de tu corazón a los ojos de Dios?