Logo de YouVersion
Icono de búsqueda

Cruz & CoronaMuestra

Cross & Crown

DÍA 4 DE 7

Santificación & Acceso a Dios

En el momento de tu salvación fuiste santificado con la sangre de Jesús, que fue aplicada a tu vida (Hebreos 13:12). Esto significa que fuiste separado de los demás como hijo de Dios para vivir para Él de ahí en adelante. Para mí la mejor forma de describir la santificación es compararla con una etapa final de un evento. Fuiste salvado, redimido, justificado, reconciliado y santificado; punto. Pero esta última etapa no acaba, sino que se convierte en una línea que avanza durante toda tu vida.

La santificación es el proceso por el cual el Señor acerca continuamente a Sus hijos a la imagen de Jesucristo. La vida cristiana en su totalidad sigue esa trayectoria; que va extendiéndose a medida que vamos creciendo en devoción, obediencia y conocimiento. La salvación no es el paso final, sino el principio del propósito de Dios para Sus hijos. Su objetivo es transformar cada área de nuestras vidas para convertirnos en Sus preciados siervos y embajadores de Cristo en un mundo perdido.

Este proceso será continuo en nuestras vidas porque el Espíritu Santo mora en cada cristiano, guiándonos y fortaleciéndonos para que sigamos avanzando. Él nunca nos dejará y siempre habrá otro paso más que dar en nuestro progreso hacia asemejarnos a Cristo y servir al Señor de la mejor manera.

En ese progreso es clave que podamos entrar con confianza en el Lugar Santísimo por la sangre de Jesús (Hebreos 10:19-22). En el Antiguo Testamento, el Lugar Santísimo, era el aposento interior del tabernáculo o del templo donde Dios moraba sobre el arca de la alianza. El sumo sacerdote era el único que podía entrar en este lugar tan sagrado y solo podía hacerlo una vez al año para su expiación y la del pueblo. Tras prepararse cuidadosamente a través de los ritos sagrados, el sacerdote entraba con sangre animal para rociar el propiciatorio.

Hoy, la única razón por la que los cristianos pueden acercarse a Dios es porque, espiritualmente hablando, están cubiertos de la sangre de Jesús. Cuando Jesús ofreció su vida como sacrificio por los pecados del mundo, el velo del templo – que separaba a Dios de la gente – se rasgó en dos, de arriba abajo. Este suceso sobrenatural indicaba que el Padre había aceptado el sacrificio de Cristo, lo que nos abría paso para estar en Su presencia.

Ya que nunca hemos participado en el sistema de sacrificios del Antiguo Testamento, tendemos a dar por supuesto nuestro acceso a la presencia del Señor. Ya no hay necesidad de sacrificar un cordero para poder acercarnos a Dios. Cada vez que entramos en el salón del trono del Padre, es como si Jesús nos mirase y dijese “Aquí hay uno de los Nuestros… la sangre ha sido aplicada.”

Día 3Día 5

Acerca de este Plan

Cross & Crown

Gran parte del Nuevo Testamento se escribió para darnos a conocer a Jesús, la salvación asegurada por su muerte en la cruz, y la promesa de su resurrección. En este devocional, el Dr. Charles Stanley reflexiona sobre la preciosa sangre de Jesús, su resurrección y el regalo de la vida eterna obtenido para nosotros. Únete a él para conmemorar el precio que Jesús pagó y celebra el inmenso y profundo amor del Padre.

More

Nos gustaría agradecer a In Touch Ministries por ofrecernos este Plan. Para más información, puedes visitar: https://intouch.cc/yv-easter