Juega Cada CuartoSample
Juega cada cuarto
Primer Cuarto – Preséntate
Es temporada de fútbol americano, y recuerdo que los entrenadores han estado trabajando duro con los jugadores este verano para prepararlos para una larga temporada. Un jugador necesitará resistencia, pasión y determinación para terminar bien. Esto no solo es cierto en una temporada, sino que es cierto con el flujo de un juego típico.
Hay cuatro cuartos, y no hace falta decir que la mayoría de los juegos se ganan o pierden en el último cuarto. Si tu vida estuviera segmentada en cuartos, ¿dónde te ubicarías? Primer cuarto (antes de los 22 años), segundo cuarto (de 22 a 44 años), tercer cuarto (de 44 a 64 años) o cuarto cuarto (mayores de 65 años). Aprender a jugar el juego de la vida y en el equipo de Dios requiere que demos nuestro mejor esfuerzo en el cuarto de la vida en el que estamos viviendo. No esperamos a más adelante en el juego. El primer cuarto de vida es solo el comienzo del juego y puedes volver o perder el juego más tarde. Es simplemente un calentamiento para el resto de nuestra vida. Pero es importante.
Hay una regla común que debe aplicarse a todos nuestros cuatro cuartos de vida si queremos una vida ganadora. La regla es: Preséntate – Da un paso adelante – Mira hacia arriba – Juega. Esta semana veremos esas reglas para cada cuarto de la vida en el que te encuentras. Solo recuerda, lo primero que debemos hacer en todos los lugares es presentarnos, lo que significa que le decimos a Dios: "Aquí estoy. Estoy listo para jugar. ¿Qué quieres de mí?".
No importa en qué parte de la vida te encuentres, es imperativo que aproveches el momento que tienes ante ti y hagas lo mejor que puedas por tu Rey, sin importar cuán bueno o despiadado sea tu oponente frente a ti. ¿Cómo encuentras y das tu mejor esfuerzo durante esta época de la vida? Sintonizate mañana.
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About this Plan
La vida de un hombre puede compararse con un partido de fútbol, y su objetivo es terminar bien el partido. Rocky Fleming, un ex jugador de fútbol americano de Ole Miss, te entrena a través de los cuartos de la vida y te anima a jugar con la Palabra de Dios.
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