"Laudate Dominum" - AdoraciónSample

Alabanza Universal

El Laudate Dominum, asi es conocido popularmente el capítulo más corto de toda la Biblia. Lo podemos encontrar en el Salmo 117. Solo tiene 2 versículos. Por este motivo, tristemente suele ser pasado por alto y hasta menospreciado por algunos. Pero en los próximos días analizaremos algunos puntos fundamentales para nuestro vivir, y descubriremos su gran importancia en nuestra adoración.

Comenzaremos hablando de que se trata de un salmo de alabanza y reconocimiento. El mismo era usado en la liturgia judía y en sus festividades, especialmente en la Pascua. Formaba parte de la secuencia de los salmos aleluyáticos o "Salmos Hallel Pascuales" (del 112 al 117). Se evoca de forma poética y sentida el gran milagro de liberación israelita de las manos del gobierno egipcio. Es un salmo muy especial para el corazón de un judío. Algunos aseguran que fue cantado por Jesús antes de su pasión (Mt. 26:30).

Hoy analizaremos el primer versículo. El salmista tendrá en mente la adoración universal. Usa dos palabras hebreas para enfatizar esta idea. Primero dirá "jalal", lo que significa no solo "alabar, sino glorificar, aclamar. Luego usará la palabra "shabákj", la que significa "celebrar".

En el pensamiento del salmista es vital la adoración a Jehová. No solo cantar la grandeza de Dios, sino también rebajarse ante Él. Ser parte de una celebración especial a Su Nombre. La adoración es tan significativa que no debe faltar en nuestras oraciones diarias. Nos ayuda a conocerlo más a Dios, a ser más sensibles a Su cuidado y a tener más fe.

Es lamentable observar en nuestra sociedad que la cosmovisión teísta muchas veces es apagada por el posmodernismo egoísta y subjetivo de las masas. Por esta razón, somos llamados hoy a adorar al Señor. De corazón, con cada cosa que hagamos. Rebajarnos para que crezca Él. San Pablo escribirá que todo lo que hacemos, sea para glorificación divina. Vivimos par glorificarlo. No porque tengamos un Dios ególatra, sino porque Él quiera compartirnos Su gloria, todo lo que Él es con nosotros. Es una relación recíproca. Así que, todo comienza por la alabanza de una persona, y así transforma todo un pueblo y toda una nación.

Hoy separa un momento para solamente alabar y reconocerlo a Jehová. Disfruta plenamente ese tiempo y medita preguntándote si realmente TODO lo que haces forma parte de una adoración diaria al Creador. Inclusive puedes memorizar el versículo que meditamos. ¡Es sencillo! ¡Es hora de mirar a la adoración de una manera diferente y trascendental! Mañana continuamos nuestra reflexión.

Palabras clave: aclamar (jalál) y celebrar (shabákj).

Isaías y Lautaro Silva