YouVersion Logo
Search Icon

Mis batallas por ganarSample

Mis batallas por ganar

DAY 4 OF 11

  

Las batallas correctas

Pensando en conflictos o diferencias con otros, ¿Podrá alguien ganar todas las batallas que enfrente? Y si fuera posible, ¿habrá tenido sentido ganarlas? Estoy convencido que muchas de las “discusiones” que tenemos, podrían evitarse si solo valoráramos correctamente el motivo de la discusión.
En este pasaje Pablo, con mucha experiencia en el tema conflictos, le dice a Timoteo, su joven discípulo, “No te enganches en palabreríos, discusiones, sin sentido, porque termina destruyendo todo y te lleva al pecado”.
La primera mención en la biblia acerca de Pablo (Saulo), lo encuentra luchando por defender la verdad. Bueno, al menos la verdad que él creía en ese momento. Es en el capítulo 8 de Hechos. Un joven acababa de confrontarlos con la descripción más clara y cruda de sus acciones, como nadie lo había hecho antes. Los había expuesto, y su ira crecía con cada palabra. Sus dientes crujían, mientras escuchaban a Esteban, y entonces les declara una visión, un Trono, un Rey, una realidad que no podían ni querían ver. Fue su sentencia. Saulo no pudo aceptar lo que años después vería con sus propios ojos. Ese trono y ese Rey eran reales. No había sido un invento de Esteban. Pablo lo supo varios años después de haber hecho justicia con sus propias manos.
Me pregunto si al llegar a ese lugar, al trono de la gracia, donde lo llevó el Espíritu, habrá recordado las palabras de Esteban, “He aquí, veo los cielos abiertos, y al Hijo del Hombre que está a la diestra de Dios”. La perspectiva había cambiado, como puede cambiar la nuestra sobre algunos temas. Por eso, antes de emprender la lucha, mejor revisemos que estamos viendo todo el panorama. Todo punto de vista es la vista desde un punto. Puede ser solo eso.

Day 3Day 5

About this Plan

Mis batallas por ganar

La imagen más común de un guerrero podría ser de pie, junto a su vencido, mostrando su poder, gozando su victoria. No es así en el Reino. Ganamos las batallas que nos encuentran de rodillas en el lugar correcto. Arrasadoramente humildes, extremadamente honestos, absolutamente vulnerables, delante de aquel que ganó para nosotros, la más grande de todas las batallas

More