"Dichosos o felices los perseguidos"

Quiero aclarar aquí, si eres perseguido por actuar como un verdadero cristiano, entonces esta promesa es tuya. Pero si eres perseguido por que te metes en la vida de los demás, porque juzgas sus hechos, o por tratar de demostrar que eres más santo que los demás; entonces esta promesa no es tuya.

Este valor es por hacer lo que es justo, por vivir correctamente de acuerdo a los valores del Reino, y como dice en I de Pedro 3.14, si te persiguen por actuar rectamente, por honrar el nombre de Cristo, serás dichoso o dichosa.

El texto incluye una advertencia, los insultaran, los maltrataran, los acusaran con mentiras; todo eso vivirá aquel o aquella persona que decide obedecer a Dios poniendo en Él su confianza. Y de nuevo va acompañado de una promesa, el premio se recibirá en la presencia de Dios mismo.

Vive los valores del Reino, son la marca que te identifica, es lo que te hace diferente, porque pertenecemos a un reino que no es de este mundo, pero está en el mundo y se manifiesta en ti, en mi y en cada persona que decidió seguir a Cristo aunque cueste.