DÍA 8: Aceptando la Voluntad de Dios Para Ti

Tomemos un momento hoy para estar con Dios. Si deseas hacer esto en familia, te recomendamos que reserves un tiempo después de tu propio tiempo con Dios para repasar juntos el contenido familiar que se encuentra en la parte inferior.

PAUSE

“La voluntad de Dios es que sean santificados”—1 Tesalonicenses 4:3 (NVI)

Cuando hablamos de “la voluntad de Dios”, a menudo pensamos en ella en términos de lo que Él quiere que hagamos: decisiones, acciones y dirección. Pero ¿qué pasa si la voluntad de Dios se refiere más a quiénes somos qué simplemente a lo que hacemos?

En griego, la palabra “voluntad” (thelēmatos) se refiere a los buenos deseos de Dios para nosotros. El versículo de hoy deja claro su deseo máximo: nuestra santificación y transformación a la semejanza de Jesús.

La santificación no es un cambio instantáneo; es un viaje de por vida. Cuanto más tiempo pasamos con Jesús, más llegamos a conocerlo. Cuanto más lo conocemos, más lo amamos. Y cuanto más lo amamos, más nos parecemos a Él. En pocas palabras, nos convertimos en lo que contemplamos.

REFLEXIONA

Más allá de estos 21 días de oración y ayuno, ¿cómo es tu vida devocional? ¿Con qué frecuencia te involucras con la Palabra de Dios? Considera desarrollar un ritmo consistente y sostenible de estudio bíblico que continúe después de esta temporada.

ORA

Padre, quiero conocerte más profundamente. Por Tu Espíritu, transfórmame para ser cada día más como Jesús. Ayúdame a buscarte, a dedicar tiempo a Tu Palabra y a crecer en amor y obediencia. Revélame tu corazón, tu mente y tu voluntad. Amén.

Para Tu Familia

PAUSA

Lee 1 Tesalonicenses 4:3 en voz alta con tus hijos. Ya sea que salgan a caminar, hablen en el auto, discutan durante la cena o se reúnan antes de acostarse, elijan un momento del día para discutir y orar juntos.

REFLEXIONA

Comparte la idea principal con ellos.

• Dios quiere hacernos más como Él.

Pregúntales:

• ¿Cómo es Dios? ¿Cómo puedes mostrar el carácter de Dios a los demás?

ORA

Guía a tus hijos a orar usando estos puntos de oración.

• Agradece a Dios por salvarte.
• Piensa en una característica de Dios a la que quieres parecerte más (por ejemplo: amable, misericordioso, amoroso, etc.). Pídele a Dios que te ayude a ser más así.
• Ora para que otros experimenten la paz de Dios.

Ora esto por tus hijos:

Padre, queremos conocerte más profundamente. Te invito a la vida de mis hijos (nómbralos) para consolarlos y enseñarles. Haz que tengan hambre de pasar tiempo contigo todos los días y ayúdanos a todos a ser más como Tú en nuestros corazones y mentes. Amén.